No, no nos equivocamos, el teletrabajador es un trabajador y como tal tiene iguales derechos, obligaciones y por supuesto festejos. Así, se va reconociendo en las diferentes leyes que fueron sancionadas desde el año 2008 en Colombia y en Costa Rica, a las cuales mas tarde se sumó Brasil y en esta semana se hará la 2da votación en Perú cuya primera votación fue unánime. Seguramente este número ira creciendo debido a numerosos proyectos que ya se han presentado en diferentes países. Todos los proyectos pueden verse en la investigación Teletrabajo, Políticas Públicas y Modelos de Legislación que realizamos para el IDRC y cuyo libro esta disponible en forma gratuita en PDF.
Equivocadamente, el trabajo a domicilio muchas veces fue considerado de menor valor o asociado al trabajo doméstico. Así en algún momento se debatió si era posible restarle derechos, o fijarle remuneraciones mas bajas, confundiendo que podríamos estar hablando de otra cosa.
Pero, las discusiones y debates llevados a cabo en el mundo reconocieron que no hay diferencias entre una forma de trabajo y la otra, especialmente cuando esta se implementa en empresas a las cuales podríamos ubicar dentro de la Sociedad Industrial. Ello significa que siguen pautas de establecimiento reguladas a nivel local, que tienen un espacio físico a disposición de los trabajadores y que cumplen con horario de ingreso y salida regulado por las leyes laborales. Así, lo confirma el acuerdo marco firmado el 15-07-2002 por La Confederación Europea de Sindicatos, ETUC, junto a las patronales europeas Unice/Ueapme y Ceep que destaca entre otros temas, el carácter voluntario del teletrabajo y la obligación del empresario de informar al teletrabajador de información relativa a acuerdos colectivos y a la descripción de su trabajo, a la participación en las elecciones de sus representantes y a la comunicación con los mismos, como si se tratase de un trabajador que se encuentra en la oficina. Este acuerdo marco ha sido citado prácticamente en todos los proyectos de nuestra región.
En cuanto a las condiciones de empleo, los teletrabajadores tienen los mismos derechos y garantías que otros trabajadores en presencia física y se les debe aplicar la legislación y los acuerdos colectivos de la misma forma que al resto.
Notese que es el “día internacional del trabajador”, no solo del “empleado”. A pesar de que identificamos en primera instancia a la clase trabajadora dependiente de un patrón, debido a que la lucha social fue iniciada por ellos en Chicago en el año 1884 buscando la jornada de 8 horas. Sin embargo las transformaciones en el mundo del trabajo extienden este día a todos los que desarrollan tareas de producción y de servicios sin reparar en el tipo de relación laboral que se establezca.
Las leyes actuales regulan al teletrabajo con herramientas de la sociedad industrial, exigimos un lugar para declarar a la ART y le hacemos, en muchos casos, cumplir horario aunque no lo necesiten, pero sobre este tema ya conversamos en algunas otras oportunidades y en mis libros que tuve el gusto de compartirles.
Lo importante en este momento histórico es que “todos son trabajadores”, los que están en relación de dependencia y los que realizan tareas por cuenta propia o autónoma. Sin desconocer el mérito y las luchas de los trabajadores del siglo XIX, los del siglo XXI están evolucionando en gran medida hacia el trabajo autónomo y autodirigido, siendo uno de los principales motores del desarrollo económico, paradójicamente debido a la grave crisis mundial. Aunque, no queremos dejar de destacar los esfuerzos que desde los gobiernos locales se hacen para ayudar a los pequeños emprendedores y a las PyMES.
Un interesante proyecto llamado GEM (Global Entrepreneurship Monitor) realizado por un consorcio de países
observa el comportamiento comercial en America Latina considerandolo como una de las patas del crecimiento economico en la region. Reconoce que hay tres fases, una de recursos, otra de eficiencia y la última de innovación y que la mayoría de nuestros países estan en las primeras dos.
De todos modos, sin ahondar demasiado en el detalle del modelo es interesante ver que la innovación está especialmente en el espíritu emprendedor al que caracteriza por su actitud, las actividades que desarrolla y las aspiraciones personales.
Esta clasificacion u orden necesario para el desarrollo económico comercial, depende claramanente también del contexto político, social y cultural.
Igual que en el teletrabajo están los emprendedores que lo hacen como una oportunidad y aquellos que lo hacen por necesidad, o sea porque no tienen otra cosa.
Esta relación porcentual hay ido variando en el tiempo, actualmente el 50% de los emprendedores lo ven como una oportunidad frente al 30% que emprenden por necesidad. Recuerdo que en el año 2002 escribimos una nota sobre emprendredores en nuestro boletín teletrabajando y Argentina era uno de países, junto con Brasil que mayor porcentaje de emprendedores por necesidad tenía.
Comprobando así que son las crisis las que activan nuestra creatividad, despiertan en nosotros desafíos que antes no teníamos. Son las crisis las que nos permiten animarnos a concretar aquello que soñamos. Así la “necesidad” con el tiempo se transforma en “oportunidad”.
La siguiente es una tabla que muestra las motivaciones de los emprendedores en el 2010:
Descubrimos un nuevo camino creado con la fuerza de nuestros propios brazos, donde nuestra mente y espíritu pionero tienen un rol indiscutible, que nos convierte a todos en protagonistas de la nueva construcción socio-laboral para el desarrollo económico del país.
Otro momento histórico se avecina, los emprendedores de la mano de las tecnología compondrán un universo que irá tomando características más distintivas que lo separarán de la sociedad industrial tradicional y que requeríra de la mayor innovación educativa de la historia pero tambien de la mayor innovación de los sistemas productivos conocidos hasta el momento.
Por ello, los invitamos a todos, a sumarse a Torres de Teletrabajo y a avanzar juntos hacia ese futuro, que aunque poco conocemos, queremos que de oportunidades para todos y en las mejores condiciones.
¡Feliz día del Teletrabajador!
Sonia Boiarov
Torres de Teletrabajo, Piso 123, Oficina D1