Por: Alejo Bernasconi
Al venir de una familia muy “voleibolera”, creo que en el primer post les dije que mis viejos se conocieron jugando a este deporte, les puedo asegurar que he visto muchísimo voley. De acá, de allá, de todas las categorías y ramas, en todas las canchas, cuando sólo se sacaba desde posición “1″ o cuando al receptor se le decía “punta viva”. Es por ello que estoy en condiciones de compartirles una jugada que según mi impresión es el mejor punto en la historia del voley:
Alain Roca, el talentoso polifuncional de Cuba
Tal vez les parezca exagerado, tal vez existan mejores (¡por favor, háganmelo saber!) pero lo cierto es que aquí están de manifiesto todos los fundamentos de esta bella disciplina, podemos apreciar absolutamente TODO: Potencia en el saque, precisión tanto desde la recepción como desde el armado, sistema de defensa/bloqueo, técnica de secante y hasta cómo NO pegar una vendida. Recuerdo haber visto este partido en vivo en el año 2000, si mal no recuerdo fue en el mes de julio, un domingo al mediodía/tarde. El partido en cuestión era la final de la Jeep America’s Cup (cuando tal marca ponía un fangote de dineral para financiar el evento) entre el Brasil de Radamés Lattari con las figuras emergentes de Giba y Dante (es último de opuesto) sumando la experiencia de Mauricio y Tande, vs la poderosa Cuba que años más tarde se desintegraría por problemas diplomáticos (de eso hablaré en un post especial). Lo raro de esto es que Brasil pudo campeonar como local recién casi 8 años después. Disculpen la calidad del video pero no lo encontré en ningún otro lugar, algún día digitalizaré el partido completo ya que lo tengo en VHS, al final del encuentro hay una seguidilla de saques clave de Ramón Gato para que el conjunto de la isla se quede con el título enmudeciendo al Maracanazinho. Un lujo de punto, una delicia.