Mis 5 imperdibles de Toledo, España.

#ActitudViajera

En el 2010 tuve la posibilidad de viajar a España por trabajo. Luego de varios días visitando Barcelona y Madrid, terminé mi recorrido en Toledo.  Un lugar mágico, envuelto en una atmósfera medieval que la pinta como un destino imperdible de España. En este post comparto algunas pequeñas grandes experiencias en esta ciudad.

Era un hermoso día de abril, cuando decidí emprender viaja a Toledo. No tenía muchos días libres pero mucha gente conocida lo había recomendado. El tren sale de la terminal de Atocha de Madrid y en tan sólo media hora se llega a destino. Desde la estación de tren de Toledo salen buses regulares que te llevan al caso histórico.

Ese día caminé mucho. Tenía un lindo mapa pero por momentos fue imposible seguirlo. Lo ponía al derecho y al revés. Calles, callecitas, pasajes angostos donde apenas puede caminar una persona…que lindo es perderse en este lugar. Detrás de cada esquina algo te sorprende y te cautiva. Aquí algunos de mis momentos imperdibles:

  • Apreciar las diferencias. En Toledo han sabido convivir distintas religiones. Durante el recorrido de la ciudad es posible ver iglesias, conventos, sinagogas y mezquitas. Esto la convierte en una ciudad rica en arquitectura y mobiliario religioso. No hay que reprimir la curiosidad y aprovechar para ingresar y recorrer cada uno de estos sitios.
  • Abriendo y cerrando puertas. Cuando algo me deslumbra, se nota. Muchas de las fotografías que tome ese día tuvieron como protagonistas a las puertas. Todas ellas tienen sutiles detalles de construcción sobre madera, algunos arcos lobulados y relieves que no pasan desapercibidos. Detrás de todas ellas se abre un mundo de cuentos, claustros, patios, etc.
  • El arte del damasquinado. Entre tantas vidrieras, me detuve en una en la cual había un artesano realizando un trabajo llamado damasquinado. Es una artesanía muy antigua en la cual se utilizan finos hilos de oro y plata sobre bases de acero o hierro. Ingresé al local y muy atentamente me explicaron en qué consistía esta tarea tan particular. Es una artesanía típica de Toledo, que vale la pena regalar y regalarse.

  • Siempre hay tiempo para el mazapán. Es la perla de Toledo. Hay tiendas históricas de mazapán en toda la ciudad y son verdaderos especialistas. Si bien no es lo que más me gusta, no iba a irme sin probarlo. No tenía mucha idea sobre variedades y formas de venta (por unidad, docena, etc.) Lo divertido fue intentar comprar mazapán en un convento de clausura, donde las monjas no hablan ni una palabra. Puse voluntad pero no pude hacerlo. Terminé comprando algunos en una gran tienda frente a la plaza principal.
  • La vista panorámica. La Catedral Primada es una de las iglesias más pintorescas y bonitas. Les recomiendo subir a algunas de sus torres para obtener una bonita vista panorámica de Toledo y apreciar un mar de techos irregulares. Un lugarcito tranquilo para apreciar el paisaje.

A Toledo tengo pensado regresar. Aún tengo varios escondites por descubrir. Una escapada medieval que deja al descubierto la diversidad cultural de España.

Ni lo duden!