Por: Ignacio Damonte
Todas las series que siguen en juego están 3-2, sea para los equipos con ventaja de localía o no. Eso demuestra lo parejo que se ha presentado esta postemporada. Miami y San Antonio barrieron a dos rivales claramente inferiores, pero el resto de los cruces se han presentado más parejos de lo esperado. Todos están a un paso de la hazaña. Hoy veremos cómo esquivaron la primera bala Boston y Houston ante Knicks y Oklahoma…
De los Rockets habíamos hablado en el último posteo, profundizando en la tarea de Delfino en la victoria en casa. Carlos fue vital con triples en momentos justos, defensa en otros y una volcada para la historia. En el quinto partido, sufrió una lesión en su pie izquierdo y apenas jugó 10 minutos, sin anotar un punto. Aún no está confirmada su presencia en el próximo juego. El que sigue afuera es Jeremy Lin, por dolores en un músculo del pectoral.
Técnicamente hablando la serie tuvo un vuelco importante. Dos mejor dicho. El primero fue una decisión clave del entrenador de Houston, Kevin McHale. Luego de arrancar perdiendo, decidió pegar el volantazo. Sacó a Smith del quinteto inicial, agregó a Beverley y consiguió tener más tiradores, abrir la llave y cambiar todos los emparejamientos. El segundo fue la lesión de Westbrook, que parece complicar más de lo imaginado a Oklahoma. Así los Rockets se dieron el lujo de soñar con un séptimo partido.
Hace dos días James Harden había estado seco, pero el equipo compensó su fatídica noche con una anotación repartida. Ayer, el agrande de Parsons (1o puntos), Beverley (14), García (18) y Asik (21) volvió a aparecer. Para que el triunfo de los Rockets deje de ser una utopía y sea realidad, debía ayudar el barbudo. Este miércoles anotó 31 puntos, con 7-9 en triples, apareciendo desde los primeros minutos. Bajó los errores (3 pérdidas de balón contra 10 del martes) y tomó decisiones correctas en ataque.
Oklahoma no pudo hacer sentir su localía. Cada vez que amagaba con meterse en el juego, aparecía alguna corrida o triple en transición de Houston que callaban a la multitud. Kevin Durant volvió a estar muy sólo en ataque (36 puntos, ninguno en el último cuarto). Apenas Reggie Jackson (20) lo acompañó en la remontada del último cuarto, aunque no alcanzó. Kevin Martin, ese que llegó para reemplazar a Harden, apenas encesto uno de 10 intentos al aro. El viernes, los Rockets irán por otra victoria que fuerce el séptimo encuentro.
http://youtu.be/gTWLMsZqis8
Houston no bajó los brazos, ganó el quinto partido ante Oklahoma y busca el milagro
Decíamos que el otro que esquivó una bala fue Boston, ante los Knicks. El corazón del equipo de Rivers volvió a decir presente en un encuentro de vida o muerte. Luego de comenzar la serie 3-0 abajo, los Celtics necesitaban quedarse con al menos un juego en su casa, lo hicieron, y la próxima asignación era robarse uno del Madison Square Garden. También lo consiguieron.
En el cuarto partido no estuvo JR Smith, que por un codazo a Jason Terry en el tercero, fue suspendido por la liga. Eso afectó la ofensiva de New York, que recayó demasiado, casi en hartazgo, en las manos de Carmelo Anthony. El número 7 tiró 35 tiros, anotando sólo 10. No fue suficiente contra la mano caliente de Paul Pierce, Jeff Green y Terry. Bostón ganó en tiempo extra y la serie se ponía 3-1.
Este miércoles el entrenador de los Celtics decidió acotar aún más la rotación y sólo siete hombres vieron acción. Cinco jugadores anotaron 15 o más puntos y Garnett bajó 18 rebotes. Boston pareció hacer el juego de NY. Su porcentaje de 50 por ciento en triples fue aplastante. Del otro lado, Carmelo tiró un poco menos, aunque mantuvo muy bajos sus porcentajes. El que tuvo una noche negra fue el que regresaba, Smith: sumó 14 puntos en 14 tiros. Muy flojo.
Los Knicks quieren volver a ganar una serie de Playoffs luego de 13 años. Parecía que estaban a tiro de lograrlo. Todo estaba de su lado. Pero volvieron a caer en ofensivas prevesibles con Anthony y Woodson, el entrenador, parece no poder o no querer evitarlo. Y en defensa están permitiendo que uno de los equipos que más sufre en esa faceta, pueda pintarles la cara. Ojo, los Celtics han hecho su trabajo. Subieron sus porcentajes, defendieron como sólo ellos saben y mandaron la historia al sexto juego.
http://youtu.be/88gt_XKYj9k
Boston sacó fuerzas de donde no las tenía, ganó el quinto y aprieta a los Knicks
Ningún equipo en la historia de la NBA ha logrado dar vuelta un déficit de 3-0 en series al mejor de siete partidos. Una marca que algún día deberá ser quebrada. Houston y Boston deberán ganar el viernes en su casa para dar un paso más hacia esa hazaña.