Por: Ignacio Damonte
San Antonio volvió a dar una muestra de carácter y confianza ante Memphis. Quizás no tuvo el brillo o la excelencia del primer partido, pero fue lo suficientemente efectivo como para ponerse 2-0 en la serie final del Oeste. En los últimos minutos parecía que dejaba escapar una ventaja amplia, pero lo cerró para volver a ganar con justicia.
Sirve repasar brevemente lo que pasó en el primer partido entre los Spurs y Grizzlies para adentrarnos en el segundo juego. El local fue una máquina en los dos costados: la defensa se cerró y enfocó en el dúo Randolph-Gasol, aprovechando la poca puntería de los tiradores, mientras que en ataque fue generoso para encontrar al hombre libre y encestar canastas fáciles. Fue paliza 105-83.
Este segundo encuentro tenía que ser distinto, sobre todo para los Grizzlies. La imagen que habían dejado en el debut fue tan mala que todos comenzamos a dudar de las verdaderas chances de Memphis de ganar. En el primer cuarto aceitó los engranajes de la defensa. El marcador lo demostró, ya que San Antonio apenas ganó 15-13, cuando en el primer partido de la serie había sido 31-14. El plan de Hollins de pelear todos los tiros y defender las cortinas rivales más arriba en la llave funcionó durante ese comienzo.
El ritmo había cambiado, Memphis había logrado bajar las ofensivas, hacer el juego más lento y combativo. Pero seguía con problemas a la hora de anotar. Cada vez que un jugador visitante quedaba abierto, los fallos se repetían: Prince, Bayless, Randolph, Allen, todos erraban. Otra vez, el único que salvaba las ropas era Mike Conley (18 puntos), el base que siempre prefiere penetrar a tirar y así causó problemas a la rotación de los Spurs.
Parker, con récord en asistencias, fue la figura de San Antonio, pese al bajón en el final
Si se preguntan por el poderío en la zona de los Grizzlies, ese que lo llevó hasta la final del Oeste, no apareció en los primeros dos cuartos. A la hora de llevar el balón a la zona pintada, se encontraban con ayudas de los defensores de San Antonio. La falta de puntería de los tiradores provocaba dobles marcas a Randolph y Gasol constantemente. Le costaba muchísimo poder anotar.
Pese a que Memphis tomó una ventaja de 4 puntos en el segundo cuarto, los Spurs pasaron a dominar nuevamente. A la fuerte defensa le agregaron puntería en ataque con triples de Green (11 puntos), Leonard (12 puntos, 9 rebotes) y una tarea perfecta de Parker en la base. El francés cerró el primer tiempo a un ritmo increíble y San Antonio se fue al descanso con ventaja de 13 puntos.
La segunda parte se fue presentando de la misma forma, hasta el cierre del tercer cuarto. Luego que Parker (15 puntos, 18 asistencias) alcanzara su récord en asistencias, se produjo un quiebre y Memphis empezó a ver luz al final del túnel. Fue mucho a la línea, Duncan se cargó de faltas. Así redujo a 12 los 18 puntos con los que lideraba el local y entró rejuvenecido al cuarto final. ¿Con qué lo hizo si estaba tan errático en ataque? Haciendo lo que mejor le sale, endureciendo la defensa y ensuciando el juego. A la hora de anotar, los rebotes ofensivos fueron clave: sumó 18 en el juego dándole muchas segundas oportunidades a Gasol (12 puntos, 14 rebotes) y Randolph.
El último cuarto fue de intercambio de canastas. Surgió en grande uno de los hombres que peor había jugado hasta aquí. El número 50, Randolph (15 puntos), cambió su 1 de 10 de tiro del primer tiempo a uno de 5 de 8 en la segunda parte, sumando rebotes y dobles después de mucho batallar en la pintura. Otro que apareció fue Bayless (18 puntos), dando algo de tiro desde el perímetro y anotación muy necesaria para su equipo.
Duncan apareció en los momentos críticos en el final con gran defensa y mejor ataque
En los minutos finales una jugada causó polémica. Luego de una doble marca en un pick and roll, Ginóbili (7 puntos, 4 asistencias, 3 rebotes) perdió la pelota y Allen se fue sólo al aro. El argentino, que no da una pelota por perdida, intentó cortar con falta pero los jueces interpretaron que de forma flagrante. Le dieron dos tiros a Allen y el balón a la visita que anotó y se puso a tiro en el marcador.
Memphis clavó un parcial de 15-2 al mismo tiempo que San Antonio falló 10 de 11 tiros en ataque y el partido dio un vuelco de 180 grados. Los Spurs pasaron de estar cómodos arriba a jugar un tiempo extra ante los voluntariosos Grizzlies.
En ese alargue, Duncan (17 puntos, 9 rebotes) se convirtió en la piedra fundamental del triunfo. Apareció en defensa con un bloqueo clave y dos canastas consecutivas, una tras un rebote ofensivo, que terminaron volcando la balanza a favor del local. Todo con 5 faltas del número 21, que permaneció en juego hasta el final. Los Spurs hicieron la tarea desde la línea de libres y lograron ganar un encuentro que se complicó más de la cuenta.
http://youtu.be/BZSJd1VMaZc
San Antonio se quedó con un sufrido triunfo ante Memphi por 93 a 89
La serie ahora está 2-0. Los de Popovich ganaron en casa, y deberán viajar a Memphis, donde los Grizzlies también son muy fuertes. El final del segundo juego fue una muestra clara de lo que será este cruce. San Antonio no la tendrá tan fácil, y no podrá volver a confiarse ante un grupo de jugadores que dejan la vida en cada pelota. El sábado, con días preciados de descanso para los dos, continuará esta guerra del lejano Oeste.