Un equipo sin alma

#BosteroSoy

Falta de rebeldía, de espíritu de lucha, de sentir lo que es Boca. Un equipo sin alma. Dentro de una Bombonera vacía, Boca también estuvo vacío…

Sin descollar, no fue malo lo del primer tiempo. Gago y Ledesma manejaron el equipo desde atrás. Erbes se mostró como un carrilero aplicado. Ida y vuelta para hacerle las cosas difíciles a Quiroga, el lateral izquierdo de Belgrano. Los cordobeses, poco y nada. Pero con algún pelotazo largo y uno que otro centro encendieron luces de alarma. La defensa parecía a contrapié y hasta Orion no daba la seguridad de siempre.

Así y todo, sumamos méritos y el 1 a 0 para ir al vestuario fue justo. Pero bastó un solo golpe del rival para dejarnos al borde del nocaut. Salimos dormidos y en apenas segundos del complemento, Belgrano empató. Nuestro equipo adelantado, vino un pase profundo, Zárate se cayó -sí, se cayó otra vez- y Rigoni clavó el 1 a 1.

Ahí empezaron los problemas importantes. El empate nos dejó tambaleando un buen rato, Belgrano se animó y nos desnudó. Toda la seguridad que mostramos en Rosario, ante Newell´s, se desvaneció en un abrir y cerrar de ojos. Ante la primera adversidad, todo se derrumbó.

Belgrano Boca

La defensa era una invitación al desborde, en el medio perdimos las divididas y los delanteros chocaban contra su propia impotencia. El gol del “Picante” Pereyra fue toda una postal del momento. El arquero dando rebotes, ante la mirada de nuestros defensores, inmóviles, observando a Orion revolcado en el piso. Mientras tanto, los atacantes “piratas” seguían pateando, hasta que una iban a embocar.

Más allá del resultado, la actuación dejó mucha preocupación. Antes hablamos de Zárate. Lo suyo viendo siendo muy flojo. Pero cuando la mano venía cambiada, el domingo hubo varios jugadores de experiencia que se quedaron parados protestando, mientras los futbolistas de Belgrano jugaban con el cuchillo entre los dientes. Los jugadores tienen la obligación de tener esa actitud con la camiseta de Boca. Recién van dos fechas. Falta mucho. Hasta la próxima.