“Antes lo dejaba más al universo, pero ahora pido lo que quiero”
Hace un mes acompañe a una amiga a Perú Beach a escalar, la verdad que lo que parece fácil no lo es tanto, se necesita equilibrio, paciencia y al mismo tiempo voluntad y fortaleza. Unir el cuerpo y la cabeza para lograr sincronizar los pasos con la destreza del cuerpo para avanzar. Luego de intentarlo un rato, me senté a leer un libro mientras disfrutaba de la naturaleza y entonces vi la soga colgando desde el cielo y pensé me gustaría volar. Sin dudarlo, le pedí al profesor de mi amiga, Mariano Tome, si no me dejaba volar. Me dijo que no podía, y seguí en mi libro, sin darle mas importancia que el de pedir mi deseo.
Con la edad aprendí que saber lo que uno quiere y pedirlo es la manera para que se haga posible. Nadie puede imaginar lo que uno deseo si uno no lo manifiesta para afuera, no lo expresa. Ese día nos conectamos por Facebook con Mariano y escucho mi charla TEDX y mi deseo de volar (https://www.youtube.com/watch?v=hVpdN4xBlDM&feature=share), de esta forma me escribe, que quería cumplirme el sueño y que volviera con mi amiga para volar. Mariano tiene experiencia entrenando a los de fuerza bruta y la posibilidad de lanzarme como uno de ellos había quedado eclipsada en mi retina casi como cuando vi a David Copperfield haciendo volar a uno de los espectadores en su show de magia.
Volvimos con mi amiga a Peru Beach en San Isidro, http://escalando.com.ar/site/, y Mariano me ato en la soga para cumplirme el sueño. Mientras subía la escalerita me preguntaba si estaba haciendo la corriente, porque a pesar de mis ganas de volar siempre tengo una especie de miedo a las alturas, a lo desconocido, a lo que podría pasarme al lanzarme. Pero en una especie de no pensar y de disfrutar de la posibilidad de cumplir mi sueño me lance al vacío. Un segundo y estaba volando, como un péndulo de un lado para el otro, subiendo mis piernas y quedándome boca arriba para sentir la liviandad del ser. Pura felicidad, pura emoción y con esta energía de sobra decidí tratar de escalar la pared. Me parecía imposible, y claramente a mitad de camino creí que no iba a lograrlo, porque el cuerpo o mejor diría la mente pone trabas, impedimentos para lograrlo. Así que sin pensar en mi poco entrenamiento y si en las ganas de pasar el desafío, y casi sacando una pulsión animal de adentro llegue a la punta.
La sensación de bienestar de lograrlo, de alcanzar el objetivo es maravilloso y la posibilidad de nuevo de lanzarte al vacío con la soga sostenida es maravillosa. Al llegar a tierra, sentí mucha emoción y entendí el placer de escalar, es casi derrumbar tus propios limites, darte cuenta de que tu cuerpo es una maquina comandada para bien o para mal por tu mente y que vos tenes el control de dejarte vencer o de lograr tu objetivo.
Este año es para probar cosas nuevas, para nutrirse, para explorar, para lanzarse a la aventura, si no lo hicieron nunca, les recomiendo darse una vuelta y probar escalar, quien les dice que los conecta con esta pulsión animal y logran disfrutar de llegar a la meta. Y otra de las moralejas de esta historia es que pedir lo que uno desea siempre es bueno porque sin saber como tal vez un desconocido se conecta con tu historia y decide cumplirte un sueño. Gracias Mariano y Sol por hacerlo posible!
Mi emoción de mi pre vuelo: https://www.youtube.com/watch?v=WHp2oelkUsg