Esta semana fue intensa, entre luz y oscuridad, entre placer e incomodidad, entre bienestar y ruido. Entre la belleza de este mundo conviven oscuridades todo el tiempo. Amo las historias de amor y la vida vive poniéndome personas que me cuentan sus historias y me abren el corazón, poesía para mi alma, así fue como el martes tuve dos reuniones de trabajo en donde primo el encuentro, y terminamos hablando de la vida, de las historias de amor. No se si me quedare con los trabajos pero de lo que es seguro me llene el alma. Porque me di cuenta que en cada historia de amor que escucho, puedo abrazar mis historias y entender mi camino y poder compartir mis experiencias.
Al mismo tiempo, el jueves a las 7 de la mañana di clase al público de yoga Kundalini para conectarnos con el corazón dorado. De esta manera di una kriya, conjunto de ejercicios, para conectar con todos los chacras y alinearlos con el corazón, sentir el corte del cordón umbilical con nuestra madre para conectarnos con el mundo, para salir a conquistar nuestro mundo, nuestros deseos, nuestros sueños. Lo importante del yoga es compartir la experiencia. Luego a las 20:30 hs. esperando una amiga en una esquina de recoleta rodeada de gente termino de hablar por teléfono y cuando estoy por guardarlo casi como magos aparece una moto con dos hombres y me agarran el teléfono de un manotazo que me tira y a los pocos metros se les resbala y lo recupero aturdida por lo sucedido. Me pregunte ¿hay gente que esta alerta todo el tiempo a robarte? ¿Como pueden vivir así? En un segundo aparecen casi como si estuviéramos viviendo en ciudad gótica y al mismo tiempo me dio un mensaje: a los que roban a la larga se les resbala y los que damos y sentimos siempre recuperamos multiplicado. Fue un milagro recuperar mi teléfono, me tomo desprevenida que no pude ni reaccionar y la vida solo me lo devolvió, creo que ni ellos entendieron que paso, pero a mi me dio el perfecto mensaje que necesitaba. Estaba súper tranquila y conectada con mi corazón desde la mañana y había estado eligiendo desde allí, le encontré la vuelta, porque siempre hay otra forma de ver la realidad. Al mismo tiempo, a la hora recibo un mensaje de un amigo de nueva York que le había dado coraje a escribir sus propias canciones, todos tenemos nuestra propia voz, nuestras historias para contar. A veces solo hay que animarse a ser protagonista y compartir desde quien sos. Me alegre al saber que las palabras correctas son llaves para abrir puertas para salir a jugar y hacernos más completos.
Andar en bicicleta, me hace volar, me hace sentir Mary Poppins, poder frenar y poder conversar con otro si me lo cruzo en la calle o hasta tomar un café con un amigo que hace tiempo que no veo. Vivimos tan alineados que nos olvidamos de frenar, de registrar nuestros tiempos naturales, nuestros ritmos para hacer las cosas y frenar es necesario en los tiempos que corren, para poder escuchar el toc, toc, toc que nos empuja a conectarnos con nuestro instinto para darle lugar a otras cosas de las que tenemos pensadas y que nuestros días dejen de estar atados a rutinas para poder hacerlos creativos y mágicos. Después de charlar un rato con mi amigo, saque la conclusión de que a veces hay que comprarnos el tiempo para ser felices. Contratarnos a nosotros mismos para tener tiempo de ocio creativo. Es lo que vale, porque sin darnos cuenta el tiempo es el bien mas preciado que tenemos, y hay que encontrarle el sentido desde lo que nos hace sentir plenos.
El sábado di un nuevo taller de pintura y meditación y un niño de unos 8 años llamado Fermín me dice “Gracias por meterme en una ilusión”. Me cuenta que al principio le costaba entrar en la meditación porque pensaba en cuanto tiempo perdía en la computadora y en todas las cosas que había para no escuchar a su corazón. Pensé en sus sabias palabras y en su grandeza de corazón de poder compartirme lo que le pasaba y al mismo tiempo me hacia feliz porque al final de tiempo el entregarnos a otro y dar de corazón siempre vale la pena. Tal vez pensemos que estamos en una ilusión, pero son de esas tan poderosas que se convierten en realidad.
Pequeñas acciones marcan la diferencia y amar siempre hace bien.
Pensamientos de esta semana:
- La vida es perfecta y las cosas simplemente son. Nuestras acciones generan reacciones, en cada decisión damos vida a un nuevo comienzo o final.
- Experimentar no es lo mismo que contar o leer. Al vivirlo vuelve la inocencia y empezas de nuevo.
“Y estamos los que vivimos a la orilla del mar; donde nunca hay despedidas, sólo pausas en el tiempo”. Ana del Aire: @Aire_tiempo
Mantra del día: I am the light of my soul ~ https://www.youtube.com/watch?v=Y3pbp575RoI