Por: Arlene Leiman
¿Sabés lo que es el Storytelling? Se trata de contar una historia, a través de un video, texto y/o fotos para publicar en las redes corporativas, pero que tenga como fin conectar emocionalmente con los usuarios.
¿Lo mismo de siempre con otro nombre? No exactamente. No es una historia común, no es un video cualquiera. La idea del Storytelling para redes sociales es presentar una historia corta que luego los usuarios recuerden, que los enganche y que como consecuencia los acerque más a la empresa, mediante una humanización de la misma.
Siete cuestiones a tener en cuenta para lograrlo:
1) Determinar un fin: ya sea entretener, emocionar, informar, impactar o lo que quieras lograr, primero deberás, como siempre, esclarecer tu objetivo, lo que querés producir en el público y luego trabajar para que así sea.
2) Sea cual sea el fin, la historia debe tener un valor, algo que conecte con el usuario, la idea es que genere una emoción. Para eso tenés que trabajar intensamente en el esquema narrativo, en cómo contarás lo que querés contar, qué imágenes vas a usar y a qué personas (o personalidades) vas a recurrir. Eso si: dejá de lado el amarillismo, ya que en general una polémica mal lograda puede generar una crisis institucional.
3) Hablá de tu empresa sin nombrarla. Es decir, a menos que la marca para la que trabajes tenga per se temáticas interesantes para desarrollar buscá temas que no sean expresamente institucionales pero sin embargo que se conecten con la empresa y logren humanizarla y acercarla más a la audiencia.
En otras palabras: evitá los temas meramente corporativos a menos que la empresa tenga una temática de la que se pueda desprender historias interesantes como si por ejemplo se trata de una agencia de viajes. En ese caso, en vez de subir a Facebook un paquete a Río de Janeiro, podés recurrir a un viajero que cuente su experiencia en Río, lo que sintió, cómo vivió el viaje, qué aconseja a todos los viajeros, etc. y finalizar con la oferta del paquete de la empresa de turismo.
4) Elegí el formato adecuado para la historia que querés contar. Para algunas cosas el video puede ser más efectivo, pero para otras lo es las palabras. Recordá que en la actualidad las personas somos muy visuales y siempre un video es más entrador que una crónica escrita, por ejemplo, pero si no tenés los recursos suficientes para hacer un buen vídeo, antes de hacer algo que haga desmerecer a la historia por cuestiones técnicas, es mejor que busques una solución más simple en la que puedas hacer lucir a la historia, que en este caso es la protagonista.
5) El impacto es bienvenido. Siempre teniendo en cuenta el punto 2, que descarta el amarillismo. Pero podés lograrlo de muchas maneras. Una buena forma de lograr impacto es a través de la realidad y la actualidad. Las cuestiones que están candentes en la agenda de los medios de comunicación son una buena fuente de inspiración para desarrollar temas que a la audiencia pueda interesarle. Como siempre, esto estará sujeto a tu tipo de audiencia y es por eso, que es extremadamente importante que conozcas a tu público y le ofrezcas contenidos adecuados para ellos. Pero las noticias, lo que sucede en el mundo o una noticia que ha generado polémicas siempre son un buen disparador.
6) No lo publiques directamente, primero promocionalo con bombos y platillos. Así de simple, si tenés una historia jugosa que mostrar al mundo; podés dos o tres días antes empezar a anunciarla y hasta dar fecha y hora en que la publicaras así jugás con la expectativa del público.
7) Buscá una identidad con la que se engloben todas las historias que vayas a contar en todos los formatos y en todos los soportes. Pensalo así: alguien tiene que ver, escuchar o leer tu historia y reconocer a la empresa (aunque esta ni se nombre) en ella. Tiene que haber una huella, que deberás dejar en todo lo que hagas, para que el público lo pueda identificar.
Nunca minimices el poder de una buena historia. Puede que tu empresa sea chiquita y que el servicio o producto que ofrezca no sea lo más masivo o atractivo del mundo, pero creé con toda certeza que una historia bien contada y que llegué a un público generoso puede ser el principio de una gran campaña de difusión.
Notas relacionadas:
- 6 tips para antes y después de publicar un post
- 10 ideas para estimular tu creatividad
- Las reglas de oro para un post perfecto