Hoy queremos presentarte a una ternerita nacida hace unos poquitos días en Farm Sanctuary, un santuario que se dedica a salvar animales de la crueldad de la industria agropecuaria.
(Foto: de la página de Facebook de Farm Sanctuary).
“Hola, mi nombre es Nutmeg (Nuez moscada)”.
Así le pusieron los guardianes del santuario a la ternerita. Su mamá fue rescatada de las pésimas condiciones a las que estaba sometida. Condiciones inherentes a su estatus de cosa, de pedazo de carne vivo, de fábrica de leche de vaca para personas (humanas).
Si hacés click en mi gato Kuro, vas a poder ver un video de Nutmeg teniendo un round de cariño con su mamá, que está muerta de amor por su bebita. Vas a ver cómo disfruta de su baño, de vivir junto a ese otro ser -de la cual no debería ser separada nunca-, de disfrutar de la vida que tod@ terner@ debería tener: fuera de jaulas, pisando césped, corriendo y jugando con otros terneritos. Teniendo vida de vaca, teniendo la posibilidad de ser feliz. La vida que todos deberíamos haber tenido a esa edad.
¿En qué lugar del mundo crees que Nutmeg sería más feliz? Su mamá, que fue esclavizada y torturada por ser una vaca, sabe la respuesta.