A mí también me gustaría decir que es conveniente escuchar al otro.
Muy conveniente.
¿Por qué?
Porque posibilita que uno se avive. Se apiole.
Dicho en términos sencillos y tal vez efectivos.
Cuando escuchamos al otro facilitamos que la potencia intelectual ajena nos enriquezca. Porque esa mirada del mundo o de cierta situación es un aporte de valor que nos insta a repensar.
Una actividad que supone siempre un resultado positivo.
Por qué, podrá pensarse nuevamente.
Porque cuando alguien nos aporta su mirada genuina, tenemos la posibilidad de cuestionarnos críticamente. Y en esa acción sencilla se abre la posibilidad de superar nuestra mirada.
Con lo cual la escucha atenta y comprometida, es un aporte esencial para el desarrollo de nuestra comprensión y la elaboración de nuevas perspectivas. Que nos ayuden no solo a percibir de manera más amplia el presente, sino a proyectar con mayor efectividad el futuro.
Darnos cuenta que nuestra mirada del mundo puede estar equivocada, no solo es un acto de humildad. Es una valiosa comprensión que nos facilita superarnos. Gracias a otro que está dispuesto a ofrecernos su forma de ver.
Por eso negar la capacidad de escucha no es tanto un acto de soberbia. Si no de desinteligencia.
Se aprende poco de quien piensa igual y mucho de quien piensa diferente.
Permitámonos poner algunos puntos sobre las íes. Porque hay ciertas cosas que se deben cumplir para habilitar la escucha activa e interesada.
La humildad, podría apuntarse. Primero.
El desapego con las ideas que conforman la identidad. Situación que obstaculiza la posibilidad de superarnos.
Y un mínimo nivel de seguridad. Que permita ver que quien disiente con nuestro entendimiento, no es ningún enemigo. Es un valioso compañero que nos ayuda a pensar.
Quizás el mayor desafío es poder transformarnos.
Escuchar es animarse a ser diferente.
*Juan Valentini es autor de “Escritos de la Vida”. Los contenidos de este Blog no forman parte del libro. También es autor del libro de superación personal “El Campeón: filosofía práctica para ganar en el juego e imponerse en la vida”.