La comparación

#EscritosDeLaVida

Uno no puede ver lo que elige el otro. Demasiado tiene con ver lo que elige para sí mismo.

Aunque el tema, claro, es la confusión. Uno elige en función de sus intereses, de sus motivaciones. Y también con la percepción de lo que elige el vecino. De ahí que si cambia el auto o se va de viaje a la montaña, la playa o donde sea, no es una información menor.

Hay que observarlo bien.

Indagarlo.

Por algo decidió tal o cual cosa. Podría ser una síntesis adecuada y perfecta.

¿No?

mirarEso es lo que hacen muchos. Descentran su vida de sí mismos y la centran en la vida del vecino. Y por qué el vecino hizo esto o aquello. Por qué se fue de vacaciones para aquel lugar. Quizás a mí –o a nosotros- nos gustaría hacer lo mismo. Ir a donde va el vecino o adquirir las cosas que compra.

Aunque tal vez no deberíamos comprar un taladro. Pero en el fragor de la confusión uno se encuentra muchas veces en un lugar que en verdad no eligió por sí mismo, con objetos que no eran propios de sus auténticos intereses: bicicletas, relojes…

Quizás hasta cambió el auto.

Y ahí está quizás el error, el error es la confusión que incentiva la vista enfocada donde no tiene que enfocarse.

En el vecino.

El compañero de trabajo. O el ser cercano.

Uno debería tener mayor nivel de conciencia y autonomía. Observarse a sí mismo y adentrarse en sus auténticas motivaciones.

Preguntarse para dónde quiere ir. O qué es lo que quiere obtener.

Y obrar en consecuencia. Mirando solo su brújula interior.

Caso contrario es un títere de su propia vida.

 

*Que tengas un excelente día. Hasta la próxima!

Libros de Juan Valentini

Escritos de la Vida - Juan Valentinitapa2 para face