Por: Mauro Gago
El origen de la frase el “Talón de Aquiles” y el guerrero griego más célebre
La expresión es conocida. Tal vez haya quedado un poco en desuso en estos tiempos en dónde hasta las palabras antes aceptadas oficialmente por la Real Academia Española han cambiado. Pero aun así, una gran mayoría sabe que cuando hablamos de nuestro talón de Aquiles nos referimos a ese punto débil que tenemos cada uno de nosotros, ya sea una ineptitud física, psíquica y/o emocional. En ese sentido, mientras nosotros aludimos metafóricamente a la frase, el mejor guerrero de los griegos, Aquiles, padeció de forma literal la debilidad de su célebre talón.
La leyenda comienza cuando un Oráculo revela que el hijo de Tetis sería mucho más poderoso que su padre. Ante semejante premonición, los dioses Zeus y Poseidón, que osaban poseerla sexualmente, tuvieron que reprimir sus pulsiones por miedo a que el vaticinio se cumpliera y su futuro hijo fuese más poderoso que ellos. En consecuencia, la cedieron en matrimonio a Peleo, rey de Ftia. Cuando finalmente nace Aquiles, su madre decide sumergirlo en la laguna infernal Estigia para hacerlo inmortal, pero al sostenerlo desde el talón, su mano hacía que la poción infernal no recubriera esa parte del cuerpo del niño. En efecto, Aquiles sería invencible… a menos que lo hirieran en el talón.
Así fue como Aquiles se hizo famoso por su fiereza, por vencer a cualquier rival que se le cruzase y por ser inmune a cualquier herida que le propinaran, razón válida para que sus enemigos temblasen de sólo verlo cerca. Sin embargo, el descuido de su madre le haría pagar con la vida, cumpliéndose así el Oráculo que también auguraba una vida célebre pero efímera. Precisamente, en la Guerra de Troya, luego de vencer y matar al príncipe Héctor, defensor de la ciudadela, el gran guerrero Aquiles fue herido mortalmente por una flecha venenosa lanzada por Paris, hermano de Héctor, que fue a dar precisamente en su talón desamparado.
Desde entonces, cualquier punto endeble de las personas ha sido reconocido como su “talón de Aquiles”, haciendo referencia a esa parte del cuerpo vulnerable del héroe, que su madre Tetis, en su intento por hacerlo inmortal, olvidó sumergir en la laguna Estigia…
Asimismo, en medicina también se alude al mito de Aquiles para designar a una parte del cuerpo humano. No por casualidad, el tendón de Aquiles es aquel tendón de la parte posterior de la pierna, que emprende su recorrido desde los gemelos, uniendo este músculo y el sóleo con el hueso calcáneo, más conocido como talón.
Ahora que sabés de dónde proviene la expresión, ¿Me contás cuál es tu “talón de Aquiles”?