Por: Bruno Aleotti
Y de repente gira la bola en la ruleta del destino y ahora nos depara que ganamos los clásicos y cargamos hasta el hartazgo a los rivales, es cierta esa frase de que en la vida todo vuelve. Buuuuu. Mas allá de que enfrente estuvo el convulsionado San Lorenzo de Ricardo Caruso Lombardi, de capa caída- va casi desnudo- poco le importó a Racing para propinarle una goleada, tras derrotarlo por 4 a 0 por la novena fecha del Torneo Apertura 2012 y dejarlo en descenso directo, como a River el domingo pasado.
Acertó Luis Zubeldia en sacar a José Sand del once titular para darle una nueva oportunidad- y vaya que la aprovechó- a Javier Cámpora, quien marcó el tercer gol del partido, participó mucho del juego en ofensiva y hasta recupero balones en mitad de cancha. Cachorro se juntó bien. Vietto, la figura del encuentro, y Centurión, ambos ya son una realidad. Ellos formaron un tridente veloz que penetro plenamente la línea defensiva del ciclón, que tuvo una noche de terror ya que Gentiletti y Prósperi marcaron en su propia valla. De no creer. La suerte estuvo de nuestro lado. Pellizcame.
En el arranque del partido Racing no manejó la pelota, pero cuando la tenía sabia porque sector lastimar. Centurión fue un avión a chorro por la banda izquierda, y en una de esas jugadas que a veces piensa en el equipo en ves de la personal (lo tiene que hacer más seguido), a los 14 mandó un centro al área para Villar y por suerte- la suerte de Racing- Prósperi metió el antebrazo y el árbitro Diego Ceballos sancionó penal. Y si, ahí iba el. Corrió de área a área. El ejecutante era el líder académico. Era Sebastián Chino Saja para desgracia de los cuervos para la alegría de nosotros. A él no le tembló su magnifico pie zurdo, lo abrió y colocó el balón al palo derecho de Migliore. Y pidió perdón, pero corrió a la popular celeste y blanca. Se abrazó con Vietto, Cámpora, Villar, Zuculini y Pelletieri. Demostrando que acá hay un nuevo grupo que de a poco se encamina en la tabla de posiciones. En busca de lograr que Racing logre la regularidad para andar en piloto automático en el Torneo. Nada fácil, por cierto.
La juventud y los más veteranos todos tiran para el mismo lado. Los que ganan partidos y los que ganan títulos. Así lo definió Fernando Tano Ortiz porque sabe que en este campeonato tan parejo el que es mas regular se lo lleva. Hay que ser vivos y pillos. La alegría es total. Volvimos a ganar tres clásicos ( Independiente, River y San Lorenzo Buuuuuuu!) como en el Clausura 2001 y falta Boca. Por lo pronto se viene Colón, un duro partido con un gran rival, que nos eliminó de la Copa Sudamericana, pero poco nos importa y cantamos envalentonados que nos vamos todos a Santa Fe.