Por: Bruno Aleotti
Estos jugadores parecen no responderle más en el campo de juego a nuestro entrenador (el último campeón en el club) al Rey Mostaza. Quieren incendiar al hombre estatua. Esto se notó en los últimos dos partidos frente a Lanús y Boca Juniors-ambos terminaron con derrotas-. Son ellos los que nos están llevando a volver a mirar la tabla de promedios. No se pasan la pelota entre si, no ponen actitud, no tienen sangre, no tienen vergüenza deportiva. Al parecer se sienten cómodos teniendo el marcador en desventaja; hasta a veces da la sensación de que ir ganando les molestara. Eso es poco en comparación con que algunos hasta se animan a sugerir compañeros de equipo como futuro director técnico por si Carlos Reinaldo Merlo no puede revertir este duro presente- que quede bien en claro que en el único que confío es en EL-. Pasaron cinco entrenadores ya!!!sin embargo al parecer los depredadores siguen con su apetito voraz, mientras Racing se desangra en la cancha fecha tras fecha. Poco les importa a estos nefastos. El manto sagrado se respeta. Esto no se aguanta más. Referentes de cartón, jugadores de relleno y juveniles con aires de rockstars llevan a la Academia nuevamente al fondo de la tabla. Lamentablemente no hay otros debido a que esto es lo que tenemos para afrontar lo que resta del Torneo Final. Ojalá se llegue con tranquilidad a junio para que Merlo descabece a este plantel horrible.
El domingo en Rosario frente a Newell´s tengo ganas de ver-como todos ustedes académicos- que los jugadores demuestren de una buena vez por todas que quieren salir adelante. Desde ya les digo que para volver a sumar van a tener que poner la pierna diez veces más fuerte de lo que lo vienen haciendo. Van a necesitar volver a correr durante los noventa minutos para atacar y defender. Si un compañero esta mejor ubicado para llegar al gol, denle el pase, no hagan la individual para salvarse. Tienen que volver a ser solidarios, o entender que deben serlo, porque eso se perdió o se hacen los sonsos.
El sentido de equipo no tiene que quedar solamente en una frase se tiene que vislumbrar en el verde césped. Quiero que estén comprometidos con esta camiseta, con el entrenador, con nosotros y con sus compañeros. Si no dan respuestas serán nuevamente juzgados y les quedará poca en nuestra gloriosa Institución. Despiértense o dejen de hacerse los dormidos, viejo! Por favor. Les ruego, les suplico que a la gente no le pidan más nada. Se sabe que les va a dar aliento-porque en las malas mucho más- pero no a ustedes, al club. Son ustedes los que salen con nuestra camiseta a jugar, háganla respetar, valorenla!
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Saquen fuerzas desde donde sea, como lo hacemos nosotros. Dicho esto también aprovecho para comentarles que este es el momento de sumar, de ir para adelante, tengamos energía positiva. En el segundo tiempo frente a Boca quedó en claro que alentando y no insultándolos por ahí se dignan a arrimarse al arco, y hasta en una de esas llegan al gol. Tenemos que tirar todos para el mismo lado sino vamos camino a la catástrofe deportiva e institucional. No hay mucho más que agregar. El resto ya lo dijimos y cansa. Dirigentes, jugadores y cuerpos técnicos anteriores tienen gran parte de culpa del momento que nos toca atravesar. Lo que se hizo mal no se puede revertir, ya es tarde. Es la hora de ustedes jugadores. Demuestren que no son indignos, que no se defecan sobre nuestros colores.
Defiendan a nuestro ídolo Carlos Reinaldo Merlo, como lo haríamos nosotros si saldríamos a la cancha ¿Es mucho pedir? Si están en desventaja, salgan a vender caras las derrotas. Me daría algo de esperanza si al terminar los partidos sus camisetas están empapadas en sudor. Los quiero ver enojados cuando terminan los partidos, no acomodándose el pelo para las cámaras de televisión. Esto viene en relación a la pelea que tuvo el rubio director técnico académico con los dos periodistas ¿Saben porque académicos Mostaza estaba ofuscado en la conferencia de prensa post derrota con Boca? Le duele mucho perder. En cambio a nuestros jugadores no y eso es MUY GRAVE. Necesitamos volver a sumar de carácter urgente. Están obligados a dar señales de vida, señores. Es el momento de ustedes ¿Nos van a volver a desilusionar?