Por: Bruno Aleotti
Por él. Solo por él. Racing volvió a vivir, nosotros a sonreír. Con Carlos Reinaldo Merlo sentado nuevamente en el banco de suplentes la mira de la crítica apuntó sobre los jugadores. Se les acabaron las excusas a los muchachos y empezaron a responder en el campo de juego-otra no les quedaba-. Desde el retorno del último entrenador campeón con la Institución, la Academia sumó 11 puntos producto de tres triunfos (Olimpo, Gimnasia y River), dos empates frente a Quilmes, Central y dos derrotas ante Vélez y Argentinos. El les transmitió tranquilidad a los más jóvenes, les asumió responsabilidad a los veteranos, absorbió toda la presión de la gente, le dio un orden táctico al equipo, lo convirtió en solidario y volvió a conseguir que nos hagamos fuertes fuera del Cilindro-el equipo termino invicto en esa condición desde su llegada-. Ah por si faltaba algo más le convidó toda su buena fortuna a la Acadé.
Solo él podía lograr que este plantel se vuelva a sentir fuerte ante cualquier rival, y lo consiguió. Este Racing es capaz de revertir resultados en contra, algo que con otros directores técnicos era imposible. Él sabia que venia a un equipo hundido en una crisis futbolista. Llegó en un autobomba para apagar todos los focos de incendio que nuestro club estaba sufriendo. Empezó a trabajar, nah nada de vender humo, laburar, laburar y laburar. Sumó altura con los ingresos al once titular de los juveniles Gaston Campi y Esteban Saveljich. Volvieron a aparecer los goles (hasta Hauche empezó a mojar), las sociedades futbolísticas y la suerte le hizo un guiño a Mostaza para volver a posarse sobre la parte alegre de Avellaneda- o no descendida-.
Tampoco soy un necio. Se que todavía no se solucionaron todos los inconvenientes futbolísticos que el equipo refleja fecha tras fecha. Es más no se si este plantel cambiará tanto el semestre que viene, teniendo en cuenta que se puede sumar solamente dos incorporaciones (deberán ser de jerarquía) y algún jugador puede dejar la institución. Lo único que sé es que el capitán de este barco sigue demostrando saber y entender la ruta de viaje. Y si además del orden logra transmiterles a nuestros jugadores más ganas, garra y testosterona, los resultados pueden empezar a revertirse. En ese camino se está, con el Capitán Merlo al borde del timón de esta nave que quiera tratar de volver a viajar viento en popa.
Del último partido ante Central me quedo con la confirmación del gran torneo que esta teniendo el lateral derecho Jose Luis Gomez, con la avivada de nuestro capitán Saja que derivó en la expulsión de Donatti-demostrando que esta concentrado en todos los aspectos que rodea al juego-, con la vuelta al gol de Gabriel Hauche- Merlo va en busca de su levantada- y la buena fortuna de Racing- la que le convidó Carlos Reinaldo, obvio-. Seamos buenos entre nosotros académicos, con otro entrenador la última de Lagos estaba adentro pero la cabellera rubia desde el costado encandiló al cordobés y, luego, enmudeció al Gigante de Arroyito con su efusivo grito de gol. Él sabia que se sumó de casualidad en un terreno complicado ante un buen equipo por eso semejante alarido. Todos en nuestra casas frente al televisor lo festejamos de igual manera. Una especie de simbiosis celeste y blanca.
http://www.youtube.com/watch?v=ksAwlG1U0Cw&feature=c4-overview&list=UUVaBaF-hwssjipOoQgcClNw
Visto la mediocridad reinante en nuestro fútbol, hay un espacio para volver a ilusionarnos en el próximo torneo. Por eso la consigna de los académicos, y de los jugadores que nos representen, deberá ser : MOSTAZA O MUERTE.