Por: Facundo Etchebehere
Habitualmente se piensa que el centro de la gestión de relaciones públicas está en la prensa y en cuantas notas se logran con una acción. Una buena gestión de relaciones públicas tiene su núcleo en la generación de ideas que permitan una mejor comunicación con los diferentes públicos de interés de la organización.
El desafío es lograr comunicar los mensajes en forma efectiva. Para lograrlo se debe dar un mensaje adecuado a los objetivos y a la audiencia, a través de un vocero adecuado, en el momento adecuado. La prensa puede ser o no un canal adecuado.
La presencia de estos mensajes en los medios, y mejor dicho, la presencia ganada y no comprada en medios, es el resultado de la construcción de noticia.
Noticia es algo nuevo, diferente. Las noticias se comparten.
Desde la perspectiva de una organización, un lanzamiento de un producto o servicio, presentar a un nuevo ejecutivo, anunciar una inversión, pueden ser muy relevantes, pero desde la perspectiva de un periodista que recibe en forma permanente anuncios similares, puede que esto no le llame la atención.
Por otro lado, una historia bien contada puede hacer de algo cotidiano una novedad que al ser contada se multiplique por terceros, que se convierten en voceros de la misma historia. Las ideas son las que ayudan a construir la historia y las ideas son las que ayudan a lograr la atención de los públicos objetivo sobre nuestras historias.
Las historias pueden estar ligadas a una causa, a un valor, a una acción sorpredente, a los orígenes de una organzación, a la forma de hacer las cosas, y también a algún atributo de un producto o servicio. El contenido no tiene restricciones, las formas son las que marcan la diferencia.
Las redes sociales nos muestran en forma clara y concreta como ideas creativas, traducidas en imágenes, videos, infografías, son compartidas como propias por sus usuarios. Estos usuarios hacen propio eso que comparten y muchos de quienes lo reciben o lo ven compartido por sus contactos, lo toman nuevamente como propio y lo vuelven a compartir.
El éxito de una gestión de relaciones públicas se debe medir por el tipo de vínculo que logra con sus públicos objetivo, por cómo se logra incidir en sus percepciones. El mayor aporte es ayudar a contar historias y el mejor resultado es que esas historias contadas sean recordadas, y mejora aún, sean tomadas como propias por ellos y vueltas a contar.
La performance en prensa es sólo un aspecto de este desafío.