Teatro “intelectual”: excelentes recursos, pobres resultados

#TeatroUnder

La dirección, impecable. Las actuaciones, inmejorables. Escenografía y vestuarios, excelentes. ¿Y el texto? Muy bueno, pero tal vez… falla…

¿Qué pasa cuando una obra tiene todo para ganarse al público y fracasa por una de sus partes?

"Agamenón. Volví del supermercado y le di una paliza a mi hijo".

“Agamenón. Volví del supermercado y le di una paliza a mi hijo”.

El teatro es un trabajo de equipo que se compone por diferentes disciplinas aplicadas a un mismo objetivo, el hecho teatral. Combinados, puesta en escena, dirección, guión y actuación, organizan y establecen la obra total.

Reestrenada en Teatro Beckett, Agamenón. Volví del supermercado y le di una paliza a mi hijo, causa ese efecto de desconcierto: por un lado es brillante, un despliegue de excelentes recursos y talento actoral, por otro lado, desafina, ambiciona muy alto y descompone las partes del todo.

El éxito de su primera temporada volvió a traerla a escena. Sin duda, Agamenón  fue una de las revelaciones del 2012. El discurso anticonsumo en tono de comedia dramática fue muy bien recibido por el público. Sin embargo, un exceso de ornamentación en los textos la transforman en una obra demasiado intelectual. El humor se construye desde el pensamiento y no desde la acción (la “magia” del teatro).

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Las opiniones se contradicen: los comentarios sobre la obra van desde “increíble”, “maravillosa” y “malísima” (http://www.alternativateatral.com/opiniones24078-). Ciertamente, Agamenón tiene muchos elementos para llamar la atención y cautivar una audiencia. Es dinámica, visualmente atractiva y tiene muy buenos actores. El “malísima” nace del público menos pretencioso. Porque a veces, “menos es más”. Y en este caso, la búsqueda de un planteo demasiado erudito derriba la posibilidad de contar una buena historia. Sin conexión sensible, la emoción queda desplazada por la cabeza.

¿Recomendable? Sí, hay que ir a verla. Hace tiempo que el teatro porteño apela al lado cerebral del público y gana terreno. Y Agamenón no es una más del montón, despliega recursos que hacen que para muchos sea una obra “maravillosa”.

Folleto de la obra en alusión al consumismo exacerbado. Imagen original del artista Bansky.

Folleto de la obra en alusión al consumismo exacerbado. Imagen original del artista Bansky.

http://teatrobeckett.com/

http://www.emiliogarciawehbi.com.ar