Por: TeleShow
El sábado 17 de noviembre, en el Día de la Militancia, tuve la posibilidad de ver Néstor Kirchner, la película el día del “preestreno mundial”, como dijo Carlos Polimeni – orador del evento armado en el Luna Park y colaborador del guión que escribió la directora del film, Paula de Luque-.
Antes de la proyección, en pantalla gigante con un mensaje grabado desde El Calafate, Cristina Fernández de Kirchner repitió lo que había dicho un día antes: que de Luque había logrado captar lo que fue la vida del exPresidente “sin caer en golpes bajos”. Creo que la chica que estuvo sentada al lado mío en el Luna -donde se celebró el Día de la Militancia- no piensa lo mismo que la Presidente: gran parte de los 100 minutos que dura la película estuvo llorando.
Para los que se definen “kirchneristas” no será fácil ver esta película sin sentir un escalofrío en la espalda o unas lágrimas que se empiezan a formar en los ojos. Primero porque muestra algunos de los momentos más importantes de su gestión: su paso por la Cumbre de las Américas que se hizo en Mar del Plata en 2005 con un discurso fuerte en el que criticó a los organismos internacionales de crédito y a Estados Unidos con su entonces presidente George Bush sentado a metros suyo, cuando ordenó descolgar los cuadros de Videla y Bignone del Colegio Militar y su discurso en la exEsma cuando se cumplieron 30 años del comienzo de la última dictadura militar. En el mensaje previo de Cristina, ella resaltó ese momento en la exESMA, (¡Ojo! Voy a contar escenas de la película. Si no quieren saber para verla luego, no sigan leyendo) sobre todo porque la directora usó un plano en el se puede ver cómo Kirchner cerraba su puño izquierdo y con la misma mano se aferraba al atril. Con un plano, esas imágenes llegan a transmitir todo lo que estaba sintiendo y lo que pasaba por su cabeza en ese momento. Y segundo, porque en otra parte, la película se centra en mostrar cómo se formó y cómo se desarrolló la relación de Néstor y Cristina. Verlos así, humanizados, lejos de la investidura presidencial, entiendo que puede sensibilizar.
Pero Néstor Kirchner, la película desperdició la chance de llevar luz al pasado del exPresidente. Su papel como militante durante su estadía en La Plata donde estudiaba para abogado es uno de los aspectos que más se cuestiona de su figura y no hay ningún material en el film que resuelva esas dudas. También entiendo que el objetivo de este trabajo no es evangelizar a los antikirchneristas, pero dejaron pasar una oportunidad única.
Por otra parte, este documental tuvo una primera versión hecha por Adrián Caetano que finalmente no fue tenida en cuenta por los productores “Chino” Navarro y Jorge “Topo” Varela. Después de verla terminada, convocaron a de Luque para que se hiciera cargo. Según una persona que trabajó en el equipo de Caetano, lo que había hecho el creador de Pizza, Birra y Faso, Crónica de una Fuga y Un Oso Rojo, entre otras películas, estaba enfocado desde un lado más imparcial.
Además, cuando termina la película queda una sensación extraña. Kirchner fue el presidente que comandó la Argentina en un momento en el que el país necesitaba levantarse tras la crisis de 2001 y aunque puede haber muchas críticas a su gestión, de alguna manera lo logró. ¿Era necesario hacer este documental para realzar su figura y convertirlo en mito?
Por Emilio Zavaley
@emiliozava