Por: TeleShow
Te guste o no, Gasalla es Gasalla. Su humor, sea en la televisión (desde los programas que tuvo en los años 80 y 90 o participaciones en la última década), en el cine (¿quien no vio Esperando la Carroza?) o en el teatro con unipersonales o obras de texto, es una marca registrada. Luego de un récord histórico para el Teatro Nacional con “Mas respeto que soy tu madre”, Antonio Gasalla volvió a la cartelera porteña con “Gasalla Nacional”, espectáculo donde es el protagonista, está a cargo del libro y la dirección artística, y en el que apuesta a los personajes que lo hicieron popular.
“Tengo más de cincuenta personajes. No puedo hacer todos en una misma función”, le dijo el exjurado de Bailando 2012 a una espectadora. Así explicó que cada noche seleccionará cuatro o cinco para interpretarlos en el escenario. Y el cambio entre personaje y personaje no se siente: para no salir de escena, Gasalla utiliza un viejo recurso de continuar hablando, sea contando una anécdota o un chiste, mientras se cambia detrás de un biombo.
Sobre el comienzo, hace un repaso de la actualidad y ni bien empieza el espectáculo tira dólares falsos al público, ya que según él todos los argentinos sólo hablamos de plata. Además, le dedica palabras a Cristina Fernández de Kirchner y a Mauricio Macri. Cuando le toca hablar de lo personal, se mete con su salud (se operó la rodilla hace unas semanas) y la jubilación. Ese es un tema con el se siente identificado ya que se jubiló hace poco y se anima a bromear con los padecimientos que vive un jubilado.
Adivinar qué personaje va a salir a escena es un buen juego para hacer desde la butaca. El primero en saltar al escenario fue Soledad Dolores Solari, la solterona a la que todo le causa terror. Luego llegó la Licenciada Gutman, una psicóloga colgada que suele mezclar todo lo que sus pacientes le confiesan, parte en la que también se luce su partenaire, la actriz uruguaya Laura Sánchez. Y para el final guardó dos números bien fuertes como Flora, la empleada pública, y La Abuela. Pero el público que vaya a alguna de las otras funciones (habrá 40 en total durante todo el verano) puede tener la suerte de ver a La Traductora, a Inesita, Yolanda o Bárbara Don´t Worry. Es azar. Al espectador podrá tocarle cualquier personaje, aunque también va a tener la posibilidad de enterarse cuáles va a interpretar cada noche.
Me quedé con ganas de ver más. No sólo más personajes sino más de Gasalla, que en esta oportunidad apuesta a lo que ya conoce y deja de lado la renovación después del suceso de “Más respeto que soy tu madre”. Pero, como dije al comienzo, Gasalla es Gasalla y ocupar una butaca del Nacional vale la pena.
Por Pablo Montagna
@pablomontagna