Por: Agostina Fasanella
Esta frase de Paulo Coelho nos invita a desafiarnos. La rutina es la costumbre de hacer las cosas sin necesidad de pensar en ellas, es el camino trillado.
Convivimos con la rutina todos los días. El origen de esta palabra se remonta a la época de los romanos, quienes llamaban “vía rupta” a un camino roto, el mismo que abrían para hacerse paso con sus carruajes. De allí proviene la palabra ruta y su diminutivo, rutina. Con el tiempo se le dió sentido de procedimiento repetido, es decir, de recorrer varias veces un mismo camino.
Podemos relacionar la rutina con la ley de Newton del principio de inercia que dice que todo cuerpo preserva su estado de reposo o movimiento a menos que sea forzado a cambiar su estado por fuerzas externas.
Muchas personas que vienen a tomar sesiones de coaching dicen que están deprimidas porque sienten que todo es igual para ellas y creen que no pueden hacer nada para cambiarlo.
La rutina es una cárcel, una celda en la cual elegimos meternos y con el paso del tiempo hasta elegimos “tragarnos la llave que abre la puerta”, es por eso que nos sentimos atrapados y sin salida.
Romper la rutina muchas veces aterra, como dice la famosa frase “mejor malo conocido que bueno por conocer”. Pero verdaderamente la solución está en nosotros, en cambiar lo que hacemos.
Podemos empezar tomando pequeñas acciones, conocer un lugar nuevo por semana, cambiar el recorrido que habitualmente tomamos para ir de casa al trabajo, escuchar música diferente. Estas pequeñas acciones generan grandes cambios, comienzan a iluminarse las áreas del cerebro que trabajan para aumentar nuestra inteligencia creativa.
Las personas creativas rompen los patrones rígidos del cerebro y esto inevitablemente rompe de lleno con la inercia y nos invita a aventurarnos en el primer regalo que recibimos cuando llegamos a este mundo: la vida.
Tu vida es un regalo, te invito a lanzarte de lleno a vivirla y disfrutarla cada segundo… si no es ahora… cuándo?
Las fiestas son un buen momento para romper la rutina, deseo que puedas aprovecharlas para cambiar tu inercia y animarte a algo nuevo que pueda beneficiarte a vos y a las personas que más te importan.
Felicidades y todo lo mejor para vos y tus seres queridos!
Hasta la próxima,
Agostina Fasanella
Coach Ontológico
Liderarte Consultora