Por: Alejo Bernasconi
Cuando Kurt Cobain irrumpió en la escena del rock, terminó de devastar comercialmente a la oleada de bandas glamorosas, de pelos batidos, pegadizas baladas, estribillos, riffs gancheros y looks bien parecidos (algunos, no todos, eh). El aluvión de conjuntos que surgieron, en su mayoría, de Los Ángeles, New Jersey y Suecia veía pasar su ocaso y con él, la desazón de todos los fans. Hoy, gracias a la aparición de distintas agrupaciones europeas y californianas, el género renació, se renovó el público y volvieron los viejos seguidores. En medio de este contexto, Exile Party se erige como uno de los tantos lugares porteños dedicados a disfrutar un buen momento al compás del “Girls, girls, girls ♪♫”, mucho cuero, mucho batido y mucho “wouh-yeah ♪♫”:
#MondoRock tuvo la posibilidad de charlar con Alberto, uno de los organizadores y cráneos de este evento mensual que reúne cada vez a más gente y de a poco se perfila para competirle (en concurrencia) a Glamnation Party. Exile es parte de una nueva camada de fiestas rockeras ochentosas que, junto a la Wild Party, revive los mejores momentos de la etapa dorada del rock y sleaze:
“El proyecto de Exile nace en noviembre del 2012, lo formamos Julián, Carolina y yo, se nos había ocurrido porque ya veníamos haciendo movida con el rock alternativo , pero sentíamos que faltaba un lugar para toda la movida revival del glam. Veíamos que a nuestra otra fiesta venían chicos con los pelos batidos o con camperas con bandas de culto dentro del sleaze y sentíamos que esa fiesta que hacíamos en ese momento no podía darles el espacio”, cuenta Alberto. Según los protagonistas, la fiesta consiste, en pasar buena música (hardrock, sleaze, glam rock de los 70s, hair metal y en la pista de abajo clásicos de rock de todas las épocas), sin embargo lo más importante es darle el espacio a las bandas, que puedan mostrar su música (nosotros a las bandas que tocan en la fiesta no le cobramos sonido), además pagamos fletes y la banda gana en puerta según la gente que meta. La filosofía sería: pasarla bien, escuchar y agitar buena música y a la vez ser un foco de cultura dentro de la movida glam y hard rock.
-MR: ¿Crees que la Revolución sueca comandada por Crashdïet y el regreso de Mötley en 2003 fue importante para la escena?
-EXILE: Creo que eso es fundamental, creo que el rock hace 20 años que se viene fumando el postnirvana, y toda la cultura alternativa e indie, y es como que se perdió lo divertido del rock, además de que hace tiempo que no tiene un recambio fuerte. Escuchamos más de lo mismo. Creo más que nada que la aparición de Crashdïet, y en general todo el rock sueco, finlandés que en realidad no es nuevo, siempre tuvieron buenas bandas en esos lugares (Hanoi Rocks o Shotgun Messiah, por ejemplo) pero creo que este recambio sumadas a algunos norteamericanos, están gestando algo que todavía no se vio. Habrá que esperar, pero no se puede dejar pasar que un festival como el Personal Fest (ligado al rock inglés y al indie) hoy traiga a Aerosmith, Whitesnake o Buckcherry. El rock está cambiando y Crashdïet, Hardcore Superstar, Dirty Penny, H.E.A.T., Reckless Love, Wildstreet, etc. son parte del rock que general ese cambio. En Exile no queremos que el rock argentino quede afuera.
-MR: ¿Cuáles son los pasos a seguir? De a poco se van consolidando como un evento obligatorio, ¿se meterían en el mercado internacional?
-EXILE: Las expectativas a corto plazo es cerrar bien el año, nos quedan algunas fiestas, darles el espacio a todas las bandas que nos consultan por tocar, también a las que ya tocaron. y a largo plazo es que crezca y que la gente conozca más el genero (bandas nuevas, de culto, clásicas) y sobretodo más la música que hacen los conjuntos de acá. Traer bandas de afuera nos interesa, pero creemos que todavía no tenemos, ni la infraestructura , ni el dinero para hacerlos, creo que por ahora estamos en un espacio under y ahí lo importante es generar.
Está claro que lo importante es generar, y lo están haciendo. Gracias a movidas de este calibre, se impulsa el género. Además de destacar la importancia de otras fiestas más de este estilo, Alberto destaca que en Exile, no sólo hay chicos hard rock o glam, sino gente grande, algunos más chicos. “Vemos que muchos nos preguntan, cuando no conocen un grupo, qué banda es, o se quedan a verlos. Eso tiene que ver el boliche en el que estamos ahora (Sick club) que era un lugar que hacía fiestas de otros palos”, cuentan.
Así puede crecer un género tan maltratado como el sleaze, el glam y el hard rock ochentoso. Excluído por el mismo rock pesado y por el propio género, una estupidez de tamaña magnitud que no hace pensar más que si entre los que estamos en el ambiente nos peleamos, jamás se conformará una idea hegemónica del estilo, jamás se crecerá y, lo que más nos importa, jamás vendrán esas bandas que tanto queremos.
-La próxima fiesta es el sábado 5 de octubre a las 23:45 en Sick Club –> Alsina 921, C.A.B.A.
-Para más info, pueden consultar el Facebook de la Exile…Enjoy it!