Por: Ariel Wolman
Hace apenas unos días Ramón Díaz, en conferencia de prensa, sentenció: “Después de Newell’s, viene Vélez, así que ahí vamos a saber para qué estamos”. Menos mal que sumó el partido contra el equipo de Gareca, porque si tuviéramos que sacar conclusiones del partido que jugó River en Rosario habría que decir que estamos para sufrir.
Como dije la semana pasada, si comparamos con los últimos años no podemos quejarnos, ganamos 4 de 6 y estamos terceros a 4 puntos del líder. Sin embargo el bajo nivel que muestran los jugadores ya es para preocuparse.
Está claro que la llegada de Ramón entusiasmó a todo el “Mundo River” y no caben dudas de que logra llevarse toda la presión. Ahora bien, si los jugadores no hacen su parte, la mano va a estar complicada.
Barovero salió tarde en el gol de Scocco, es verdad, pero también hay que decir que tapó el segundo gol y que se muestra muy seguro en el arco, más allá de los errores de la defensa. Lo de Botinelli ya es grosero. Pierde todas las marcas, es inseguro cuando sale y varias veces le entrega la pelota a los rivales. ¿Hay que seguir bancándolo?. ¿No será mejor probar otras variantes?.
En el medio dependemos exclusivamente de Ponzio y de alguna subida de Vangioni, cuando lo dejan. Sánchez está lejos de aquel volante que se lució en el Nacional B y debería dejarle el puesto a otro compañero hasta que recupere la confianza y la precisión. Porque así como está no le sirve a él ni al equipo. Para marcar probamos a Ledesma, a Rojas y hasta a Acevedo. Ahora, ¿ninguna chance al pibe Cirigliano, que se destacó en su primera temporada en primera, aún con la presión de tener que ascender sí o sí?. Cuando Ponzio tiene a alguien que marca por él, puede soltarse más, eso está claro. De todas maneras en esta hay que darle la derecha a Ramón, porque pidió un enganche y debió resignarse en pos del “campeonato económico”.
¿Entonces? Marcamos mal. Los rivales pasan por el medio como si fuese el living de su casa y cuando llegan a nuestra área tenemos que empezar a rezar para que alguno de los nuestros al menos les tapen el tiro al arco.
Adelante también tenemos algunos dramas, no vayan a creer que no, ¿eh?. A Mora no le llegan muchas pelotas y cada vez que la tiene tiene dos defensores encima. Luna y Trezeguet son buenos jugadores de área y, por ende, recurrimos siempre a tirar centros. ¿Qué pasa si el arquero rival parece jugador de básquet y agarra todas de arriba, como ayer Guzmán?. Perdemos, así de claro.
Al menos Ramón probó ayer con Funes Mori… si, ya sé quién es el mellizo, no hace falta que me lo recuerden. Pero la menos puede sacarse a uno o dos hombres de encima, es capaz de generar alguna jugada. Lástima que entró pocos minutos, porque Iturbe tampoco tuvo una tarde lúcida contra los “leprosos”.
Obviamente me dio mucha bronca perder, pero tampoco me gusta que nuestro técnico se quede lamentando que el árbitro no cobró un gol con la mano… Habrá que seguir trabajando para ve cómo logramos que nuestros delanteros hagan goles, porque está a la vista que hay un déficit importante en esa materia…
Esperemos que este parate que se viene ahora ayude a trabajar la parte táctica para así encontrar recursos que nos ayuden a jugar mejor y a ganar partidos, sobre todo los clásicos y los partidos que, según Ramón Díaz, nos dicen “para qué estamos”.
Ariel Wolman
@arielwolman