iPhonografía

#Urbanitas

 

 

La ciudad de México cabe en un teléfono celular, o mejor dicho, los smartphones capturan fragmentos visuales al Distrito Federal y los exhiben como trofeos en las redes sociales. Jacob Bañuelos (@jacobisrael), director de la maestría en Comunicación del Tecnológico de Monterrey campus Ciudad de México, y uno de los teóricos sobre la iPhonografía defiende que este celular inteligente vino a cambiar nuestra forma de entender la fotografía, gracias a las cientos de aplicaciones especiales el aparato de Apple, ya que su plataforma hace que no sólo sea una simple cámara sino un laboratorio móvil.

 

La iPhonografia es el “arte” de sacar fotos con el iPhone y modificarlas sólo con las aplicaciones del teléfono; esto se puede lograr, de momento, sólo con este smartphone ya que otros no cuentan con la tecnología ni aplicaciones para igualar la calidad de los registros de este celular. En estos momentos se encuentra en proceso la construcción de un mapa visual de la ciudad de México que se almacena y se difunde a través de las redes sociales como Instagram o Flickr. Cientos de personas se han sumado a la iPhonografia y salen a fotografiar calles, edificios y personas.

 

Señala Bañuelos, quien además está a punto de sacar su libro sobre la iPhotografía que ahora el teléfono inteligente ya es una prótesis del cuerpo humano, nuestra conexión con el mundo físico y virtual; una brújula que, gracias a sus cámaras, vuelve más disfrutable la ciudad, porque nos reencontramos con ese universo de concreto, de ruidos, personas y vehículos que antes nos parecían ajenos, difusos y poco interesantes. De acuerdo con el teórico de la iPhonografia no falta mucho para que veamos en el Distrito Federal a personas que se implanten un iPhone en la cabeza, como ya sucedió con Waafa Bilal, un profesor de la Universidad de Nueva York que se hizo instalar una cámara en la parte posterior de la cabeza.

 

Si bien es cierto que Google Earth ha logrado capturar a toda la ciudad de México con un software, no ha logrado completar el mapamundi ya que sus imágenes son planas, sin emoción y sin detalle, pues como dice Susan Sontag, la verdadera fotografía está en los pequeños fragmentos de realidad.