Por: Ascenso Rock
Parecía un sábado de verano, de esas noches porteñas que no dan para usar campera pese a la brisa fresca que pega en la cara. Tres recitales prometedores y especiales para el rally nocturno de #AscensoRock. Vivencias de un sábado excitante con Cielo Razzo, La Perra Que Los Parió y Catupecu Machu
Muy cerca del Obelisco, pleno centro porteño, cientos de fans esperaban por una experiencia distinta, la de disfrutar un recital en un teatro. Por eso, Paraguay al 900 estaba repleta de remeras negras con las clásicas siglas LPQLP. La banda de “El Viejo” se presentaría por primera vez en un lugar así, de “otro palo”. “Fantasías Obligadas” era la cita.
Del otro lado de la Capital, Lacroze y Álvarez Thomas, otros cientos de jóvenes –y no tanto- aguardaban con alguna que otra cerveza en mano por ingresar al caluroso Teatro Vorterix. Tras casi dos años, Cielo Razzo volvería a subirse a este clásico escenario y así continuaría con el festejo de los 20 años de la banda.
Pasadas las 21.15, en el ND Ateneo y en Colegiales se apagaron las luces y se abrieron los telones. Llegaría la hora de que la música apareciera, brillara y así disfrutáramos durante dos horas de dos veladas tan esperadas.
Los rosarinos eligieron salir a las tablas “con todo”, por eso “Vieja Caña” sería el puntapié inicial a la extensa lista. En cambio, “La Perra Que Los Parió” prefirió hacerlo con algo más acorde al lugar, y “Por siempre” en versión acústica fue la canción elegida.
En el show de “LPQLP” se vivía un ambiente íntimo y cálido: la banda y su público conectados de manera cómplice, muy especial. Algo que seguramente no olvidarán con el correr de los días. Con “Murga”, “El Loco” y la compañía de un armonioso coro seguía la gran noche.
Por el lado de Cielo Razzo se vivía algo totalmente distinto: fiesta tanto arriba como debajo del escenario. Las guitarras del “Pájaro” Almirón y de Fernando Aime hacían estallar Vorterix. Tras el ya clásico grito de “Buenas” de Pablo Pino, sonaría “Carne 2”, seguido por “Te Vas”, de su último CD, Sideral.
En el Ateneo se seguía viviendo una noche mágica. Tras un vibrante solo de Jorge Bekmezian y su batería, “El Viejo” volvió junto al resto a la sala para que continuáramos ríendo, llorando, bailando, gritando, pero sobre todo, cantando al ritmo de “Olvidarte”, “Despierta” y “La Respuesta”. Luego se encargaría de presentar a la primera invitada de la noche, Sonia Rovi –de Lúdica- y juntos hicieron “Ni Tan Tarde”, del último material discográfico que lleva ese mismo nombre.
Ya iban un poco más de 20 minutos de show y “Polilla” Pino seguía subiendo la temperatura en Vorterix. Por eso invitó al cantante de la otra banda que pisa fuerte en Rosario: Sikarios y así “Choza” acompañaría una versión “potente” de “Sin Salida”. El recital continuó con la celebración de estas dos décadas, recorriendo de punta a punta su vasta discografía. “Otoño Blanco”, “De Caer” y “Reacción”.
Llegaría el momento sentimental en el centro porteño, y se daría tras escuchar los primeros acordes de “Soñar Para Seguir”, donde toda la sala se unía al entonar “Yo me siento en el infierno con vos”. Pero en Colegiales, la cosa era distinta y se ponía rockera con “Galope”, “Madre Poder” y “Ojos” –junto al “Negro” de Experimento Negro-. “Cuento con tu voz para cuando llegué el momento”, sí, con la voz sí, pero más de uno tuvo que dejar el pogo tras esta terrible seguidilla…
Eran las 22 y monedas. Un poco de rock no venía mal en el Ateneo.”Gurú”, “Amor Clasificado”, de Rodrigo y “Brindis” seguía completando esta “Fantasía Obligada”. Luego estallaría la fiesta al ritmo de “Prontuario”, “Depredador”, “La Perra Disco Bar”, con globos de colores volando poniéndole color a esta mágica noche.
Por Palermo se ya se empezaba a palpitar lo que sería un show tardío, con espera interminable pero con grandes momentos. Catupecu Machu se presentaba en Groove en el marco de una nueva fiesta Clandestina. La lluvia acecha pero aún no ataca. Por ahora…
En Lacroze y Alvarez Thomas la fiesta continúa y #AscensoRock disfruta ahora de la siempre emotiva “Qué Se Yo”, con Nahuel Márquet de Degradé. “Éste es el octavo Cielo Razzo”, decía Pino entre abrazos con su gran amigo y compañero de Los Bardos, tal como “Choza” Salanitro. La velada sigue con la presencia de “Dany” Jiménez y “Barek”, y “Mi Dios” con “Naqui” nuevamente. Repaso de “Buenas” a “Sideral”, de punta a punta. “La Cruz”, “Luminoso” y “Caminando” van dejándonos sin energía pero con una alegría inmensa.
Mientras, La Perra entona “Lo Que Nunca Te Dije”, y entre lágrimas, abrazos y más de un beso apasionado iba cerrando su gran show. “Nuestras fantasías se cumplieron igual o mejor de lo que las habíamos soñado”, transmitía un “Viejo” emocionado.
Pero en Vorterix quedaba un poco más de rock rosarino, y del bueno. Son las 22.40. Afuera, todavía no llueve pero adentro estamos todos empapados. Cielo Razzo abandona el escenario por un rato.
“Cielo Razzo al escenario por favor. Chicos, Cielo Razzo al escenario por favor”, cual señorita maestra, Pablo Pino es el único que regresa al escenario tras el recreo de 10 minutos y llama a sus amigos que aún siguen en camarines. Tras el retorno, sube la última invitada de la noche: Florencia Croci. Juntos, y hasta bailando algún tango imaginario, hicieron “Viaducto”.
“LPQLP” toca “El Viajero” y así cierra una noche soñada por algunos, y vivida por muchos. Cielo y su gente canta entre lágrimas “Ya nunca jamás olvidaremos lo que fuimos”, sabiendo que el recital va llegando a su fin. En Palermo, los primeros “Catupequeros” cierran de a poco sus “previas” para empezar a formar una larga cola de ingreso.
“Nos vamos. Gracias Buenos Aires por estar siempre”. “Polilla” agradece y ya “El niño” Robledo (uno de los mejores bateristas del país, sin dudas) da la intro de la canción donde habrá que quemar los últimos cartuchos y poguear: “Quién Baja La Pala”. “La careta pesa… Yo me tiro nena…” y el que se tira hacia su gente es Pino. Los “razzeros” lo llevan en andas por toda la sala, cual trofeo de guerra. “Si lo devuelven, hacemos la última. Sino la cantan ustedes”, grita “Narvy” al mismo tiempo que empieza a sonar esa inconfundible percusión de “Alma en tregua”. Aparece Pino en el escenario y sí… “El alma hoy no duele”.
Se termina la noche anhelada en ND Ateneo con La Perra Que Los Parió, final de la fiesta en Vorterix a cargo de Cielo Razzo, pero #AscensoRock sigue de gira (y eso que veníamos de cuatro horas de transmisión por la tarde en Frecuencia Zero). Luego de tres horas de fila bajo la lluvia que se hizo insostenible pasada la medianoche, Catupecu Machu brindaría un recital para hacer saltar, cantar y gritar al viento a todos los presentes en Groove.
Cuenta de regresión. Se activan piel y huesos. Son las tres en punto, y a Catupecu le tocó actuar, más que actuar. Brillante apertura con “Óxido en el Aire”, y para no desentonar, sigue “Confusión”, “Gritarlo al Viento” y “Perfectos Cromosomas”. Sonidos que juntos suenan fuerte.
Por supuesto, no pueden faltar sus más grandes éxitos, entre ellos “Eso Espero”, “Magia Veneno” y “Plan B: Anhelo de Satisfacción”, tema que tocan junto a Sick Porky . Catupecu deslizaba su magia por todo el terreno.
Eufórico, el público no para de corear los temas, de bailar entre seres extraños. Palermo bajo agua, y adentro de Groove lo que falta es una brisa fresca, porque tras “Origen Extremo”, “Metrópolis Nueva” y “Aparecen Cuando Bailamos”, la temperatura subía más y más.
“Gracias por venir loco y bancarse la lluvia”. Fernando agradece a su gente por acercarse, pero después de tanta espera, la única manera de remediar la situación es con más rock. Por eso, el recorrido por su amplia discografía seguía.
Cuatro de la mañana. Punteo de guitarra, se arma la ronda en el medio de la pista, y todos ya sabemos qué canción se viene ahora… “Y se hace tarde, y ya lo sabés, y no lo hacés… ¡¡¡DALE!!!”. ¡Y estalla Groove!
El amanecer se asoma, #AscensoRock debe terminar su caravana, Ruiz Díaz dice “Enciendan las luces y bailemos hasta que alguien cierre el lugar”, y con “Y lo que quiero es que pises sin el suelo”, Catupecu Machu cierra esta gran noche de rock.
Hay que volver a casa, después de una jornada agitada . Nosotros “Ahí nomás y sin dar vueltas se mandaron a la fiesta”. Mucho rock, “Pichón de ganso, ya estás curtido” y son las 5 de la mañana… ¡Queremos una cama! #AscensoRock hay que “Hacerse cargo, y no sentarse en la silla. Y si no… CALAVERA NO CHILLA”.
Por Rocio Seoane, Jesica Malvestiti, Noelia Tegli y Marcos Monclá