“La abundancia del vivir”

#ColoresDeMilagros

encuentro s

“When I’m drawing my last breath, I won’t be thinking about all those fancy degrees or conferences I spoke at. You only have a few times in your life to really cut you loose, so you might as well take them when they come”.

(Cuando este dando mi último aliento, no voy a estar pensando en todos los grados de fantasía o conferencias que di. Sólo hay un par de veces en tu vida para perderte, por lo que tendrías que tomar esas oportunidades cuando vienen.)

Hay días que me gustarían que fueran filmados, sobretodo cuando te imaginas que va a pasar una cosa y termina otra completamente diferente sucediendo. Me tenia que levantar a las 6 am para ir a meditar y aunque lo hice, la almohada le gano a las ganas y me quede durmiendo hasta que un llamado por teléfono me levanto y me hizo darme cuenta que no llegaba a mi clase normal de yoga y ya llegaría tarde al Stand que tenia que terminar de pintar en FE VIDA; así que sin apurarme ya que mientras tanto tenia que coordinar la llegada de un amigo español de cuando vivía en Utrecht que no veía hacia mas de 10 años y que pararía solo 6 horas por buenos aires y quería visitarme. No entendía que quisiera verme después de tanto tiempo y pudiendo hacer tiempo en el aeropuerto por el trasbordo o ir a ver algo turístico.  Hacía como 6 días que estaba con la visita porque me había contactado con linkedin cosa que ni entiendo para que sirve y no sabía nada de su vida por tantos años pero no podía explicarle en la cantidad de cosas que estaba metida. Deje que fluya, le dije que viniera a casa desde el aeropuerto ilusamente pensaba que iba a terminar.

Llegue en bici tarde a pintar pero la onda de la feria me encanto, todo el mundo contento, no se si es la espiritualidad que te pone sonrisas pero me dejaron entrar con la bici al lugar de exposición cosa que no podía creer. Me puse a pintar, y claramente a la hora que pensé que terminaría no lo hice y tuve que decirle a mi amigo español, por suerte existe el whattsapp, que fuera directamente a la galería que tenia que presentar algo. Me habían regalado la entrada para ir a ver a Ravi Shankar y con la difusión que tiene su figura sentí que tenía que sacar mis propias conclusiones al respecto, debía experimentar su presencia. Encontrarme con mi amigo español era mas importante para mi que Ravi Shankar pero dado que percibí que no iba a llegar a la hora que me dijo me deje fluir y me fui en bici a casa para cambiarme para volver a escucharlo. Cuando estaba volviendo a agarrar la bicicleta siento que si me iba a encontrar con mi amigo, no era tan buena idea. Así que vuelvo a dejar la bici y paro un taxi que se me va pero agarro al de atrás y me toco un taxista muy simpático que me hizo reír todo el viaje y al mismo tiempo me dijo hablemos solo cosas buena onda (parece que los taxistas con este “let motiv” me tocan a mi).

Llegue a las corridas pero dispuesta a escucharlo. En realidad lo que mas me conmovió del evento fue ver la cantidad de personas maravillosas convocadas en buenos aires para hablar de la espiritualidad, entendida como algo que uno hace para estar mejor con uno mismo y al mismo tiempo lo puede extender a los demás. La meditación del Ravi Shankar me dio mucha paz. Tengo que reconocer que me transporto a mi mundo y no escuche nada de mi alrededor, pero mi compañera cuando abrimos los ojos me dice, no escuchaste al periodista protestando, etc., etc. Le contesto que la verdad que no, me fui a otro lugar, pero tampoco sentí que me cambiaba la vida su presencia. Cero fanatismo.

Salí con mi sonrisa dispuesta a encontrarme con mi amigo español en la galería y me encuentro con una periodista que me dice con tu look colorido me das para la nota, pensando que me iba a preguntar algo mas global sobre la feria, me sorprendió la cantidad de stands y cosas lindas y ricas para ver, probar y comprar. Pero ante mi sorpresa me pregunta que siento sobre Ravi Shankar y realmente no sentí nada especial o diferente, así que tuve que cambiarle de tema, contándole de la responsabilidad de cada uno por hacer la diferencia, por no engancharse, por sonreír y hacer cosas que uno hace bien, le hable de bancarte, y la importancia de los colores en nuestra vida. Claramente no conteste su pregunta así que me fui riéndome convencida de que no iba a salir la nota. También me entere que el lío del periodista se debía a que cuando nos hicieron cerrar los ojos el camarógrafo también lo hizo con la sorpresa de que le robaron mientras tanto el lente de la cámara, ya ni meditando hay respeto.

Salí de la feria plena, y feliz y me encontré con la lluvia constante y un trafico terrible, claramente tomar un taxi me haría llegar tardísimo a la galería así que me fui caminando bajo la lluvia (eran siete cuadras), riéndome de todo lo sucedido en el día, nada de lo que había pensado había sucedido.

Llegue a la galería y me encontré a 50 artistas maravillosos convocados para intervenir un banco, otro bancarte, pero este con fin solidario, para caritas san isidro en el marco de Arte espacio. Yo tendría que haber pasado a buscar mi banco por Dara dado que lo había dejado el día anterior porque no había entendido el mail y como claramente no pude pasarlo a buscar, fui sin esperar que estuviera ahí, pero por suerte lo trajeran igual, así que me reencontré con mi banco rodeado de muchos hermosos bancos y encontrándome con grandiosos artistas y diseñadores, una fiesta. Pero lo que capto toda mi atención fue encontrar a mi amigo español mimetizado entre todo el ruido de la gente. Había cambiado, era todo un hombre aunque su sonrisa se mantenía inalterable.  Hacia 10 años que no nos veíamos pero parecía que fuera ayer y estaba mas buen mozo de lo que recordaba. Nos habíamos conocido porque se había enamorado de mi arte ya que pintaba para la revista de la universidad de Utrecht cuando vivía allá, y haciendo memoria, termine dejando por un mes y medio las valijas hasta volver a la argentina en su casa en España mientras me iba a Marruecos y a seguir viajando por Europa. Una caradura total porque ni lo conocía pero se había presentado en una estación de tren como el fanático que me escribía (no habíamos compartido clases ni salidas pero recibía mails de lo que le generaban mis dibujos) y me dio su teléfono por si alguna vez necesitaba ayuda en Madrid, y sin dudarlo cuando llegue al aeropuerto lo llame. Me reía yo mismo de la gente que uno va conociendo en la vida y como se la reencuentra en momentos impensados, porque la verdad después de 10 años y sin tenerlo en mis contactos de Facebook ni sabia en que andaba y menos en la corrida en la que yo me encontraba (llegue a rezar porque le pasara algo al avión y se retrasara ya que estaba sin tiempo para nada).

Me saque la foto y le dije vayamos a casa, seguía lloviendo en buenos aires, y logramos conseguir un taxi para tratar de ganar tiempo en el no tiempo lineal para que a las 21:30, en cuatro horas, lo pasara a buscar un taxi para que regresara a Londres donde estaba viviendo. Me contó de la última vez que había estado en buenos aires parando en casa, cosa que yo ni recordaba, en que situación me encontraría que ni lo había registrado. Lo miro y le digo me sorprendió tu mensaje en linkedin que quisieras visitarme en vez de ver algo de buenos aires, me sentí casi un monumento, me mira y me dice: “Maria es Maria”.  Y ahí me agarro de la mano y no pude soltarlo. Me contó que venia de hacer un voluntariado en Bolivia con chicos con discapacidades varias en el medio de la jungla, que había comprado especialmente el pasaje para que parara en buenos aires y pudiéramos reencontrarnos, que tenia ganas de verme pero no sabia en que situación me encontraría por eso el mensaje. Para esto yo venia de estar enamorada de alguien que hacia un mes que no me llamaba y el español se había comprado un pasaje para poder verme (en esos momentos entendes que cuando hay ganas no importa nada mas que llevarlo a cabo y podes ver mas claro lo que no es). Fue eterno el recorrido, hablando de la vida.

Llegamos a casa, había cambiado, el se acordaba de detalles y tenia muy presente un pasado que yo lo tenia desdibujado pero en el hoy yo no dejaba de mirarlo. Se había transformado en un hombre y tenía energía linda, y me encantaba, le mostré los cuadros de la ultima exposición, y saca un regalo de la valija de Bolivia para mi y me agarra entre sus brazos, nos abrazamos un largo rato, con un silencio que hablaba, y terminamos besándonos y enredados en mi cuarto. Llovía, era perfecto para mimarse. Tratamos de ponernos al día, contándome viajes alrededor del mundo y como si hubiera sabido que había posibilidad de estar juntos hubiera cambiado el viaje. Se había pasado la semana entera parando en casa pensando en como conquistarme 9 años atrás y ahora simplemente sucedía sin ya esperarlo (y yo ese capitulo ni me lo acordaba). Lo miro y le digo no estaba en mis planes que esto sucediera. En un momento me confeso que tenia pareja pero que valía la pena estar conmigo, que no podía creerlo, lo había soñado desde que me había conocido. Su mirada era transparente y su corazón estaba abierto, sentí su belleza y me sentía valorada. Me hacia sentir una joya valiosa cosa que a veces olvidaba.

El taxi toco el timbre que lo llevaría al aeropuerto, se vistió mientras lo cargaba que no había tomado ni un mate y me dice que vino a buenos aires pensando que iba a comer carne y termino comiendo de la buena. Nos reímos y nos despedimos hasta que algún nuevo encuentro nos cruzara. No era importante el futuro, sino solo lo que había sucedido. Finalmente nos habíamos encontrado. Entendí que muchas veces uno no ve a quien tiene alrededor, no se da cuenta, yo había pasado una semana en su casa en España pero tenia otra historia en mi cabeza y cuando había venido a visitarme a buenos aires también me encontraba en otra y el nunca había tenido el coraje de expresarse, de decirme lo que le pasaba conmigo. Y esta vez sin ni siquiera imaginármelo me mostraba quien era y que valía la pena. Solo tenia que seguir confiando que el correcto llegaría a mis brazos en el momento indicado, mientras tanto la vida se transforma al vivir los momentos que se te presentan.

A los 10 minutos que partió, llegan a casa unos compradores, desde hacia 10 días que íbamos coordinando la visita a casa, que cambio 10 veces de horario, y ya me reía de que a las 21:45 vinieran a ver cuadros, pero como el día había fluido de una manera extraña sin control lo aceptaba y fue mas que acertado. No solo nos reímos viajando en la imaginación y contando anécdotas para explicar cuadros, sino que terminamos concluyendo que la vida es aceptar el encuentro,el desafío que te presenta y dejarte navegar en el río sin pensar en el camino,dejándote fluir por lo que si esta funcionando. Se fueron con la alegría de que un maravilloso cuadro que encierra una maravillosa historia tiene nuevos dueños y con el llamado de mi padre diciéndome que estaba haciendo de espiritualidad que salía en la televisión. Lo cual me hizo reír a carcajadas porque la verdad le dije al periodista lo que quería decirle y nunca lo que me preguntaba, pero lo mismo valió la pena mostrarlo y no solo eso al rato el hombre que hacia un mes que estaba esperando su llamado me había visto en la televisión y me contactaba para contármelo.Ser uno mismo siempre es dar más y nunca podes saber lo que es correcto hasta que acontece y hay muchas cosas que no sabemos que pasan mientras pasan otras y del misterio esta llena la vida.