Por: LevantArt
Un estudio de la Universidad de St. Louis, conducido por la doctora en psicología Mónica Moore, confirma una vez más los principios fundamentales que nos enseña la ciencia de la seducción. La Dra. Moore dedicó largos meses a observar la interacción de hombres y mujeres en bares, shoppings y clubes nocturnos. Una de sus conclusiones principales del estudio es que en la seducción, gran parte de la comunicación sucede en el plano no verbal.
Interpretar las señales
Martín Rieznik y Mike Tabaschek dirigen la academia Levantart, una escuela de seducción para hombres. En su libro “El Juego de la Seducción. Todo lo que un hombre debe saber sobre las mujeres” dedican todo un capítulo al lenguaje corporal y los gestos. No se trata sólo de realizar los gestos correctos sino también de aprender a interpretar las señales del otro: ” Puede que una mujer no nos haya dicho nada, pero haya adoptado un lenguaje corporal positivo en relación con nosotros. Muchos indicadores de ínteres (IDIs) de las mujeres son no verbales: quienes no los nota, desperdicia buenas oportunidades”.
Transmitir correctamente nuestro deseo
En su manual de seducción, Rieznik y Tabaschek señalan los tres elementos principales que componen la comunicación no verbal: la expresión facial, la mirada y el lenguaje corporal. Sobre la expresión del rostro aconsejan: “No hay razón para no pasarla bien si estamos en una situación social. La sonrisa lo es todo en el lenguaje gestual. Siempre recibiremos mejor atención si sonreímos y nuestro rostro transmite alegría”.
En cuanto a la mirada, recomiendan no fichar. Reservar el contacto visual directo para el inicio de la comunicación. Si el acercamiento se dirige a un grupo de personas, se debe integrar a todo el grupo con la mirada desde el primer momento. Los autores aseguran que para tener éxito en seducir a una mujer muchas veces debemos ganarnos la confianza de su grupo y no intentar apartarla desde el principio. Tanto en la conversación como en la mirada, se debe alternar entre todos los integrantes.
En el lenguaje corporal, el elemento principal a considerar es si es “abierto” o “cerrado”. Todos los cruces, sean de brazos o piernas, suelen transmitir un lenguaje corporal cerrado. La ciencia de la seducción afirma que son acciones instintivas asociadas a la defensa y protección de los órganos vitales. Por eso, si uno quiere transmitir confianza y atracción, aconsejan evitar los brazos cruzados en el ámbito de la seducción.
Como conclusión general: “Recordemos que el lenguaje no verbal representa el 80% de nuestra comunicación. Un buen dominio del lenguaje corporal será siempre más efectivo que cualquier expresión enunciada, aunque se trate de la frase más ingeniosa que se nos pueda ocurrir”.
*“El juego de la seducción. Todo lo que un hombre debe saber sobre las mujeres” (Dibuks, 2013) . La primera parte del libro puede descargarse gratis en la web de la editorial.