Marcel Duchamp, el gran transgresor

#Efemerides

Un día como hoy pero de 1887 nacía uno de los artistas más provocadores que haya existido: Marcel Duchamp. Quizás todos lo recuerden por su controversial obra de arte llamada “La fuente”, que era básicamente un migitorio. Su valor paradigmático consistía en desafiar las leyes estéticas al presentar en un museo un objeto preexistente que jamás podría ser considerado una obra de arte.

La técnica de Duchamp, llamada ready-made o arte encontrado, intentaba poner en jaque lo que en ese momento se consideraba arte exaltando el valor de lo coyuntural, lo fugaz y lo contemporáneo.

Su obra ejerció una fuerte influencia en la evolución del movimiento pop en el siglo XX siendo considerado hoy como uno de los principales valedores de la creación artística como resultado de un puro ejercicio de la voluntad, sin necesidad estricta de formación, preparación o talento. Toda una odisea para aquella época.

Además fue un destacado ajedrecista. Estuvo viniendo un año en Buenos Aires entre 1918 y 1919. A pesar de que no se conocen los motivos de su elección, su amigo, el pintor Jean Crotti, dijo que a Duchamp no le gustaba Buenos Aires por parecerle una sociedad demasiado machista.

Si hoy Marcel Duchamp estaría vivo -cosa que sería imposible- tendría 127 años y seguramente seguiría desafiando las leyes del arte, buscando la forma de provocar, de invertir el significado de lo establecido, transgrediendo y maravillándonos.