El mosquetero del #StreetArt

#StreetArt

Amante de una estética que parece salida del libro de Alejandro Dumas, Conor Harrington igual que Martín Ron, el artista del post anterior, lleva un mundo a la calle. Pero a diferencia del hombre de Caseros que se  inventa ese mundo, este irlandés oriundo de Cork nos lleva al pasado y como si fuera un artista del S.XVIII (El que contrasta increíblemente con el graffiti actual), llena la ciudad de espadas, duelos, damas y caballeros.

A todo esto, Harrington también utiliza la fotografía en sus trabajos, especialmente cuando trabaja puertas adentro, para  luego intervenirlas. Así como en el blog vimos a fotógrafas como Maju Franzan y Gilda Selis que fotografiaron las calles, a artistas como JR que salía a empapelar ciudades con gigantografías y a Slinkachu que desparrama sus figuras miniatura por la ciudad, y las fotos son después la única forma de que podemos verlas, este artista llega para fusionar las dos técnicas.

Él mismo monta las escenas, pone a actores a representar lo que hay en su cabeza, toma una instantánea y luego con esa base las pinta. Él las hace reales o las desdibuja, agregando cuestiones aveces que se acercan más a los cuadros de Dalí, líneas difusas en medio de figuras hiperrealistas, toma prestado el estilo de los pintores clásicos, y lo transforma.

La crítica no deja de estar presente en sus trabajos, donde podemos encontrar mezclados en un escenario de la alta edad media, la bandera de la ONU en un rincón, animales muertos o mujeres desnudas. Cuando en una entrevista le preguntaron cómo se hizo artista, respondió: “Porque no soy bueno para nada más. Salvo para hacer té”. Si hace té como pinta, que tiemble Inés Berton.

Conor Harrington en acción 

Connor Harrington en la sesión de fotos de una de sus obras  (VIDEO)

Web oficial de Conor

Conor Harrington en la pared: