19. El habito de mentir

#AmoresTóxicos

“Ningún mortal puede guardar un secreto.

Si sus labios guardan silencio, habla con sus dedos;

la traición es exhalada por cada uno de sus poros”

Sigmund Freud

 

1)      ¿Por qué mentimos?

Nuestra vida cotidiana está plagada de mentiras. Diferentes situaciones de nuestra semana nos invitan a mentir. La mentira está al alcance de nuestra lengua por lo menos cuatro veces por día y oímos más de doscientas sin saber que son mentiras. Mentir, para muchos, es tentador, es tomar por el atajo, esconderse en sí mismo, contraer una deuda. El que miente se endeuda consigo mismo y la soledad se encarga de recordárselo.

Los primeros maestros de la mentira son los padres que nos enseñan a caretear un regalo horrible o decirle al abuelo, que lo ves dos veces por año, que lo querés. Más adelante viene toda la novela del cuco, los reyes y que si te tirás a la pile después de comer quedas frito.

Mentir no es sólo decir cosas inciertas, también mentimos al ocultar información o al decir algo que es verdad de manera tal que nuestro interlocutor crea que es un verso. El cuerpo también puede mentir a través de una sonrisa falsa, el caminar erguido con un andar de superación o inclusive el excesivo uso de un cosmético que disfraza nuestra apariencia real.

Mentimos para zafar de sentirnos expuestos, para evitar hacernos cargo de algo o para ocultar una acción que puede dañar al otro.

Los hombres no mienten más que las mujeres, pero tienden a mentir para sentirse mejor con ellos mismos, mientras que las mujeres tienen más propensión a mentir para hacer que otras personas se sientan mejor. En el hombre la ostentación, en la mujer el desvío.

2)     La mentira ingenua

Es la que se hace por piedad y que evita herir emocionalmente a los demás. Nunca le preguntes a tu pareja si te extraña ya que siempre te va a decir que si.

3)     La mentira intencional

Es la mentira netamente intencional, la más dolorosa. Es la que se dice por venganza, para obtener algún beneficio o ganar, a los codazos, en situaciones competitivas.

4)     La mentira tramposa

Es la más cruel ya que pretende hacer daño o aprovecharse de la situación sin escrúpulos.  Aquí no hay un registro del otro, todo está centrado en el objetivo a cumplir. El que engaña no negocia.

5)     El autoengaño

Posiblemente sea la que más daño colateral traiga ya que mentirse a uno mismo empobrece los modos de relación con los otros. Se da, por ejemplo, en el caso de las adicciones desconociendo o negando el daño que puede ocasionarse a sí mismo.

6)     Cómo reconocerlos

Los mentirosos son por lo general personas calmas porque necesitan de una mayor concentración para modificar la verdad… aunque todos tienen su Talón de Aquiles. La American Psychiatric Association elaboró una guía de referencia de expresiones verbales y no verbales que desnudan la mentira tomando como referencia las declaraciones que hizo Bill Clinton cuando su affaire con Monica Lewinsky tomó estado público:

 - El cuerpo se inclina más hacia adelante.

- Bebe y traga más.

- Se toca más la cara.

- Evita cruzar la mirada con otros.

- Disminuye el parpadeo.

- Se incrementa el tartamudeo en el habla

 Paul Ekman, investigador e inspirador de la serie “Lie to me” dice que los cuarenta y cuatro músculos faciales contribuyen a delatar al mentiroso y nos ofrece algunos indicadores como por ejemplo que, el que miente, evita mencionar el nombre de la persona sobre la que está mintiendo, que la voz del mentiroso sube el volumen debido a la tensión asociada con la mentira. Suelen emplear las palabras “honestamente”, “sinceramente”, “de verdad”. Cuando dicen “créeme”, uno debe hacer exactamente lo contrario. En general la sonrisa se muestra torcida y aumenta el pestañeo. Un dato curioso: el mentiroso diestro mira hacia su izquierda mientras miente y el mentiroso zurdo, hacia su derecha.

Es muy común que el mentiroso contraiga los músculos faciales, se cruce de piernas, muestre excesiva amistad y tenga la carcajada fácil.

Por último, los top five del mentiroso: “Vos sabés que yo no miento”, “No tengo ninguna razón para mentir”, “Te digo la verdad”, “¿Por qué tendría que mentirte?” y “Para serte honesto”.

http://www.youtube.com/watch?v=zx4KiX6Omy4

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C.C.C. (Compartan, Comenten y Critiquen)