Cómo reducir las fallas de los productos

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Toda empresa tiene riesgos, y cuanto antes puedan eliminarse sin llegar a que tengan un impacto negativo, puede generar un ahorro enorme para la empresa. Como comenté en la nota “¿Es tu PYME adversa al riesgo?”, algunos pueden prevenirse  fácilmente, otros no tanto. Uno de los principales riesgos está relacionado con la falla de los productos o servicios que ofrece, y puede generar desde la insatisfacción del cliente hasta accidentes graves. Una de las herramientas más comunes utilizadas para prevenir estas fallas es el AMFE, análisis de fallas y sus efectos (FMEA, Failure Mode and Effect Analysis).fmea

El Análisis de Modo de Fallas y sus Efectos busca reconocer y evaluar la falla potencial de un producto o proceso, identificar acciones que pueden eliminar o reducir la potencial falla y documentar el proceso entero. Se utiliza para prevenir defectos, mejorar la seguridad, disminuir costos, reducir los tiempos de desarrollo  y por consiguiente incrementar la .,satisfacción del cliente. Este análisis puede hacerse tanto durante el diseño del producto (recomendable) como para un producto existente que recibe muchas quejas de los clientes.

El AMFE empezó a ser utilizado en la década del ’40 por la milicia estadounidense, y luego la técnica se siguió desarrollando por la industria aeroespacial y la automotriz. El “Modo de fallas” es la forma en que algo puede fallar.  Las fallas son los errores o defectos actuales o potenciales. El análisis de sus efectos se refiere al estudio de las consecuencias de los defectos, Los defectos se priorizan según la seriedad, la frecuencia de ocurrencia y la facilidad de detección.  El objetivo es eliminar las fallas más serias y frecuentes antes de que ocurran. También se utiliza para documentar las fallas ya conocidas y las acciones tomadas para evitar recurrencias y mejorar continuamente.

Un AMFE busca todas las maneras en que un proceso o producto puede fallar. Por ejemplo, un tostador de pan puede fallar en diferentes maneras.

  • Un corto en el cordón eléctrico.
  • Los alambres queman el pan sin importar a que temperatura se le programe.
  • El mecanismo de extracción es muy sensitivo y lanza el pan tostado fuera y sobre el mostrador.

Fallas también pueden ocurrir cuando el usuario comete un error, y es sensato incluir los dos tipos de falla en un FMEA. Todo lo que se pueda hacer para asegurarse que el producto funciona correctamente, sin importar como el usuario lo utilice, moverá al producto más cerca del 100% de satisfacción.

¿Cómo hacer un AMFE?

1. Revisar el proceso: reunir a un equipo, dé a cada miembro una copia del plan del producto o hacer que lo prueben para ver cómo funciona.

2. Realizar una sesión de tormenta de ideas: todos deben preguntarse ¿cómo puede fallar el producto? Y proponer las ideas, por más descabelladas que parezcan.

3. Listar efectos potenciales de cada modelo de falla: Listar los efectos potenciales de cada falla mencionada. Si una falla tiene más de un efecto, escribir que cada uno aparte en cada línea.

4. Asignar un valor de severidad a cada efecto: Dar a cada efecto un valor de severidad del 1 a 10, siendo 10 el más severo)

5. Asignar un valor de ocurrencia por cada falla: determinar la posibilidad de que una falla ocurra y asigne un valor apropiado (desde 1 a 10, siendo 10 el más posible). Utilizar información de proveedores, estudios de clientes, experiencia de los empleados y competidores si hace falta.

6. Asignar un valor de detección a cada falla y efecto: Listar todos los controles que existen actualmente para prevenir ese defecto, si es que hay, y asignar un valor de detección (desde 1 a 10, siendo 10 el menos posible de detección).

7. Calcular el número riesgo de prioridad (NRP) para cada efecto: Multiplicar estos tres valores (el valor severo por el valor de ocurrencia por el valor de detección) para calcular el NRP.

8. Poner las fallas en orden de prioridad para la acción: Según el NRP decidir con qué fallas trabajar primero.

9. Tomar acción para eliminar o reducir las  fallas: Determinar que acción tomar con cada falla, asignar una persona y una fecha para tomar la acción.

10. Calcular el NRP que resulte cuando las fallas se reduzcan o se eliminen: Cada vez que se tome acciones para reducir los riesgos, recalcular el NRP si hace falta.

 

Con estos diez pasos se puede ahorrar muchos dolores de cabeza, costos y pérdidas de clientes, ¿por qué no intentarlo?

 

Éxitos!!

Luciana Paulise

Luciana.paulise@biztorming.com.ar