10.000 km y el Jet Lag Emocional

#TodasMisPalabras

Vos y yo

“Pensé que lo entendía, que podía comprenderlo, pero no, no realmente. Solo entendía su nebulosidad, su ansiedad delicada, toda contenida, semi-preciosa. Nunca pensé que, a veces, la idea de estar completos sería una idea lujosa. Porque son las mitades las que te parten al medio. Yo no sabía, no sé, nada de los momentos intermedios; las porciones brutales tuyas y las porciones brutales mías”.

- Like Crazy (Como locos)

En los últimos años, las relaciones a la distancia sirvieron de fuente de inspiración para más de un guión. En el caso de Like Crazy, encontramos a Jacob y Anna con un país, un océano y una violación de visa de por medio, imposibilitados para reencontrarse. Mientras que por su lado, 10.000 km retrata la relación de Alex y Sergi disolviéndose en el medio del Atlántico por elección personal y profesional.

En mi caso, escribir sobre relaciones a la distancia es una cirugía a corazón abierto: después de someter al escalpelo a más de 100 cartas de papel, meses de llamadas por skype y un backpack de nostalgia, resulta complejo, pero se puede.

Sin embargo, lo que aún no puedo definir es si una relación puede sobrevivir a la distancia. Las llamadas perdidas, las fallas de conexión y la diferencia horaria son sólo algunos de los factores que parecen estar a la orden del día cada vez que dos mitades (como dice Anna en la frase de arriba) o dos extremos intentan volver a conectar/ re-conectarse.

Es entonces cuando la distancia trasciende del plano literal al emocional, volcando un océano de invierno en el medio del verano, ampliando el interlineado de dos mitades o dos párrafos que buscan sentido; la distancia como blanqueador de nuestras “porciones brutales”, nuestros costados que apelan al recelo y la tristeza para completar las oraciones. Es entonces cuando cae el velo de dulzura, el ritual iniciático de mediaciones en el que ambas partes ceden un poco de sí para ensamblar, y así sea con 7 años bajo el brazo como Alex y Sergi o con meses de exceso de equipaje como Jacob y Anna, la supervivencia de la relación se torna cada vez más difícil.

De esta forma, y con el destiempo como eje, las “dos mitades” se alejan cada vez más del concepto de mitades, abrazando su definición de extremidades (fantasmas), y disociándose de su correspondencia con la distancia literal. Es así como el Jet lag emocional se vierte sobre la relación en puntas de pie y se muestra dispuesto a arroparla para resguardarla del invierno, cuando en ese lado del hemisferio en realidad era verano.

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A continuación, el trailer de 10.000 km, una escena de Like Crazy, y el soundtrack de una noche casi madrugada (3AM):

… y a veces el Jet lag nos alcanza sin kilometraje de por medio: