Por: Mariana Lorenzo
Resulta que alguien republica en Facebook una foto de Messi cuando era pequeño con un texto que habla de las presiones y dificultades que significan ser Messi. Cómo, este flaco que en algún momento fue “una persona normal”, está inmerso en un mundo en donde el “sólo quiero jugar a la pelota” quedó en esa imagen. También me enteré de que Messi sufre del Síndrome de Asperger, algo que desconocía, y por lo cual mucha gente critica sus actitudes.
Habla de los (pre) juicios que suelen hacerse, en este caso aplicados a él y a otros personajes famosos del fútbol, en donde la pasión por el fútbol está manchada por el ansia de poder.
A mí me hizo rever actitudes propias para con terceros. Después de todo, sólo se puede trabajar sobre uno mismo.
En muchas ocasiones, he emitido una opinión de una persona que no conozco sólo porque “me dijeron que…”. Qué error garrafal. Siento mucho haber sido ese tipo de persona alguna vez.
Tengo amistades que llegan con comentarios acerca de otras amistades en común. Comentarios para nada agradables, por cierto. Si hablan así de otros, ¿cómo hablarán de mí a otros? Pero hace tiempo decidí que iba a hacerme mis propias opiniones, así que simplemente escucho, observo y dejo Ser.
Al terminar de leer ese artículo publicado en Facebook, una frase me vino a la mente: “Lo que Juan dice de Pedro, dice más de Juan que de Pedro”. Lo que uno es a la larga (o la corta) se ve reflejado en cada acto, en cada palabra, en cada opinión. No hay esencia que se pueda ocultar.
Hablando con una amiga al respecto de si nuestro entorno nos refleja, ella opinaba que el “Dime con quién andas y te diré quién eres” lo cambia por “Dime con quién andas y te diré en qué te podrías convertir”.
Inmediatamente recordé una película que me encanta: The bucket list, conocida aquí como Antes de partir, protagonizada por Jack Nicholson y Morgan Freeman, en la que dos enfermos de cáncer con perfiles completamente diferentes se cruzan en la sala de internación de un hospital y así emprenden un viaje que, más allá de ser literal, los lleva a un camino de autoconocimiento.
Hay una frase en particular que me quedó grabada: “Es difícil entender el valor de la vida de una persona. Algunos te dirán que su valor está dado por aquellos seres queridos que ha dejado detrás. Otros creen que puede ser medida en Fe. Otros dicen que en Amor. Otros dicen que la vida no tiene ningún valor. ¿Yo?. Yo creo que tu valor está dado por aquellas personas que te toman como medida para medirse.”
¿Qué tipo de persona te toma como modelo a seguir?
Yo creo que si uno se mantiene fiel a sus valores, indudablemente, todos aquellos que no crean ni practiquen los mismos se irán alejando. O acaso uno mismo se irá alejando de esas personas.
Lo más importante es que siempre es buen momento para aprender a ser mejores Seres Humanos. Me dijeron: - La pregunta es si todos quieren aprender. Creo que no. No todos pueden manejar la incomodidad que provoca salir de la zona de confort, donde uno tiene que hacerse cargo de su vida, porque siempre es más cómodo decir - soy lo que me hicieron ser. No todos quieren aprender, no todos están preparados para ser conscientes de que estar donde estamos es exclusiva responsabilidad de cada uno, porque eso exige compromiso y autoexigencia.
Yo quiero aprender a ser mejor. ¿Ustedes?
“Hay quienes se consideran perfectos, pero es sólo porque exigen menos de sí mismos” – Hermann Hesse
Padangusthasana. Fortalece pies, tobillos, rodillas y cuádriceps. Elonga parte posterior de piernas y músculos de la espalda. Trabaja la estabilidad al enraizar la confianza en el apoyo de los pies.
Ph: Carito Belmonte – https://www.facebook.com/phcaritobelmonte
Importante: Todas las asanas deben aprenderse con la guía de un Instructor calificado.